Duración: 46:19 minutos de juego.

Saques: 7 de Ezkurdia (tantos 2, 7, 8, 11, 12, 16 y 18) y 5 de Peio Etxeberria (tantos 2, 4, 8, 12 y 16).

Faltas de saque: 1 de Ezkurdia y 1 de Etxeberria.

Pelotazos: 250 pelotazos en juego.

Tantos en juego: 5 de Ezkurdia y 5 de Peio Etxeberria.

Errores: 4 de Ezkurdia y 7 de Peio Etxeberria.

Marcador: 1-0, 2-1, 3-6, 8-7, 9-10, 19-11, 20-12, 21-13 y 22-16.

Incidencias: Partido por el tercer puesto del Cuatro y Medio de Primera disputado en el frontón Labrit de Iruñea. Media entrada. En el primer partido, Víctor-Rezusta ganaron a Bengoetxea VI-Aranguren (7-22).

- Jugar el partido por el tercer y cuarto puesto nunca es sencillo. La pena de quedarse a las puertas de la final y ese bajón propio después de días de mucha tensión se mantienen en el cuerpo. Es un partido que los pelotaris quieren ganar, pero al mismo tiempo pocos desean jugar. Este año les tocó a Joseba Ezkurdia y Peio Etxeberria. Amigos fuera de la cancha y duros adversarios dentro de ella. Fue un choque sin regalos, con tantos peleados hasta la extenuación. El arbizuarra impuso su jerarquía en la segunda parte del partido, aprovechó la velocidad de su pegada y sin arriesgar demasiado se agarró al dominio del peloteo para romper el partido y vencer por 22-16. Ezkurdia se lleva el bronce después de haber perdido un único partido en todo el campeonato y Peio Etxeberria, pese a sus dos últimas derrotas, se despide como un pelotari que ya ha dejado claro que tiene que ser tenido en cuenta cada vez que se disputa el Cuatro y Medio.

La derrota en las semifinales fue un palo para ambos pelotaris y fue necesario un periodo de adaptación más largo de lo habitual al partido. A ambos manistas les costó encontrar la brillantez en el juego, sobre todo a Ezkurdia, al que se le vio más apagado de lo habitual. En ese inicio dubitativo, faltó el colmillo en el remate, pero eso no impidió que la dureza fuera una de sus señas. Costó mucho hacer cada tanto y Peio Etxeberria, con el saque como arma principal, consiguió destacarse, sumando varios cartones de manera rápida y saliéndose de la tónica del duro peloteo. El delantero de Zenotz se marchó así hasta el 2-6. Sin embargo, le faltó subir un poco más el nivel para dar el golpe definitivo a un rival tocado y lo terminó pagando.

Unos errores de Peio Etxeberria fueron oxígeno para Ezkurdia. El arbizuarra se reenganchó al partido y consiguió detener la sangría de tantos. Con los dos pelotaris de nuevo a la par, el marcador se mantuvo parejo en la primera mitad (10-10). Los tantos siguieron siendo muy exigentes y pese a que ambos intentaron meter velocidad a su golpeos y hacerse con el centro de la cancha, no hubo un dominador claro. Además, el saque, ese factor desequilibrante en los duelos individuales, no tuvo una incidencia notable. Así, salvó los disparos iniciales convertidos en éxito, el saque no sirvió para coger el mando de los tantos y el peloteo lejos del frontis fue una costumbre.

Pero en la segunda parte Ezkurdia despertó. Volvió a acercarse a ese pelotari capaz de mandar con su fuerte pegada y a volver locos a sus rivales. El delantero de Arbizu jugó de manera seria, sin arriesgar en exceso, pero sin equivocarse prácticamente en ninguna decisión. Golpes y golpes vertiginosos hicieron que Peio Etxeberria se viera condenado a una defensa constante y a recibir cartones en contra uno tras otro. Ezkurdia se marchó hasta el 21-12 y pese a que el de Zenotz apretó en el desenlace, el marcador dibujó un 22-16 final.

Por otra parte, hoy será el turno de la final de Segunda en el Burunda de Altsasua a partir de las 18.00 horas. Joanes Bakaikoa, que ya ganó la txapela en 2018 y disputó el campeonato de Primera en 2019, se presenta con un mayor grado de experiencia. Sin embargo, su oponente no se queda atrás pese a su más corta trayectoria. Iraitz Zubizarreta ya sabe lo que es fajarse con los mejores y en su primera jaula de plata ha mostrado su potencial para llegar a la final. El encuentro se presenta igualado y apunta a ser de una alta exigencia física.