bilbao - El ciclista vizcaino Beñat Intxausti aseguró ayer lunes en Bilbao, donde hizo oficial su retirada, que deja el ciclismo en activo "satisfecho y orgulloso con lo conseguido" a lo largo de una carrera profesional marcada al final por una mononucleosis que le impidió dar su nivel los últimos cuatro años. Han sido en total trece años en siete equipos profesionales, en los que hasta finales de 2016 todo iba conforme a lo que apuntaba una de las mayores promesas de su generación.

Entre los equipos cuyo maillot vistió Intxausti (Muxika, 1986) están los de las mejores escuadras del mundo en su momento: el Saunier Duval (2008-2009), el Euskaltel-Euskadi (2010), el Movistar (2011-2015) y el poderoso Sky británico (2016-2018).

El vizcaino arrancó su etapa entre profesionales en el Nicolás Mateos (2007) y la cerró en Euskadi-Murias (2019), donde asumió que no consiguió "volver al nivel de antes o al nivel al que quería llegar yo".

"No ha sido posible, por mucho que lo he intentado. Después de mucho tiempo pensando con mi pareja y mi familia he decidido dar este paso. Ahora es el momento de anunciar que aquí es donde ha terminado mi carrera", dijo, de todos modos, "satisfecho y orgulloso con lo conseguido".

Especialmente durante su época en el Movistar, en el que vivió "cinco años muy buenos en todos los aspectos", aunque con el lunar de la tragedia del "fallecimiento de Xavier Tondo". "Todos conocéis las trágicas circunstancias de su muerte y yo era su compañero de habitación. El año fue mentalmente duro y debuté en el Tour, pero abandoné por un codo roto", recordó.

Pero también explicó que "de azul" y formando "parte del mejor equipo del ranking tres años" llegaron los mayores éxitos de su carrera: "Mis dos triunfos de etapa en el Giro, la Vuelta a Asturias, el Tour de Beijing...".

"Y -continuó en una comparecencia para oficializar su retirada- algo que siempre va a quedar en mi recuerdo es la maglia rosa del Giro de Italia. Si no me equivoco, soy el único vizcaino hasta ahora que la ha vestido. Es un orgullo con todos los grandes corredores que hemos tenido en Bizkaia", se congratuló Intxausti.

También fue segundo en una Vuelta al País Vasco y dos veces corredor de la selección española en un Campeonato del Mundo de fondo en carretera.

Asimismo, recordó que "con 30 años" fichó "por el Sky, el mejor equipo del mundo, el equipo de mis sueños", donde, "por desgracia, después de mi primera carrera y mi primer podio, en Valencia, sufrí una enfermedad de la que me ha llevado mucho tiempo recuperarme".

No se olvidó Intxausti de sus primeros años en la Sociedad Ciclista Amorebieta, en el Seguros Bilbao de aficionados a las órdenes de los técnicos Xabier Artetxe -ahora en el Ineos- y Mikel Madariaga, con los que consiguió certificar "grandes resultados" en dos años, y su posterior paso por el Saunier Duval dirigido por Joxean Fernández, Matxin, y el Euskaltel de Miguel Madariaga, con el que estrenó su palmarés profesional.

Artetxe, Mikel Madariaga y Matxin acompañaron ayer en la despedida a un Intxausti acompañado también por Peio Bilbao (Bahrain McLaren) y por los excorredores también vizcainos Igor Antón, Roberto Laiseka, Rubén Pérez e Iker Camaño. - Efe