Donostia - Carlos Sainz (Mini) aprovechó la primera jornada que ha superado sin percances para alzarse en el liderato después de lograr la victoria en la tercera del Dakar 2020, con inicio y meta en Neom. El madrileño empleó un tiempo de 3h.48:01 en recorrer los 467 kilómetros cronometrados pactados. Asimismo, Fernando Alonso (Toyota) rubricó una gran actuación, la mejor hasta la fecha, una quinta posición, que le sirve para rehacerse del accidente sufrido el lunes, con el que perdió más de dos horas, y que a la postre sería un cuarto lugar tras la sanción impuesta a Nasser Al-Attiyah.

"Al final ha ido todo bien", se congratuló Sainz, que había superado dos jornadas previas "un poco agridulces". A pesar de estar donde hubiera deseado, el madrileño, veterano de las dunas, se proyectó con prudencia tras firmar su victoria de etapa número 33 a lo largo de sus trece participaciones en el rally. "Aquí diez minutos corren para un lado y para otro con mucha facilidad. Hay que seguir cautos", pronunció. No obstante, admitió que "es mejor seguir adelante que detrás". En definitiva, el bicampeón del Dakar (2010 y 2018) confirmó que "lo importante es ir pasando días y seguir estando ahí delante". Ahora marca la pauta.

Si Sainz amanecía con 4:43 de desventaja con respecto al líder, el argentino Orlando Terranova, El Matador finalizó la jornada copando la clasificación general, con 7:55 de margen sobre el vigente campeón, Nasser Al-Attiyah, quien recibió una sanción de tres minutos por impedir el paso de Sainz, y 8:09 sobre Terranova, que ayer cedió 12:52. Giniel de Villiers, triunfador en la segunda etapa, también perdió tiempo, tanto como 16:21.

El lunes nacía un drama para Alonso, cuyo objetivo es finalizar el Dakar pero tratar de hacerlo en las posiciones destacadas. El asturiano se recuperó ayer con una notable actuación, una quinta plaza provisional y cuarta definitiva, pero con ritmo en algún parcial incluso superior al de Sainz. "No vine para ganar el Dakar este año ni para hacer podio. Soy consciente de mis limitaciones para este año. Hace unos meses nunca me había subido a un coche de rallys, hace cinco meses no conocía a Marc Coma", manifestó Alonso, segundo Toyota en la jornada de ayer, con un tiempo de 6:12 de pérdida en relación a Sainz.

No obstante, el bicampeón mundial de Fórmula 1 reconoció que la undécima plaza del estreno del Dakar y la cuarta obtenida ayer le han inyectado "algo más de moral" sobre sus posibilidades. Alonso es ambicioso y no lo esconde. "Quiero siempre un poco más", aseveró. De modo que para hoy espera poder "aprovechar la buena posición" de salida a fin de "intentar algo más, como estar entre los tres primeros". "Ganar una etapa sería mágico. Parece imposible, pero después de estas dos últimas etapas tengo algo más de moral", apostilló. Su discurso destila confianza. Ayer, según indicó, le costó coger ritmo porque en la jornada previa, después del accidente en el que rompió la suspensión delantera izquierda al chocar con una roca y que le dejó más de dos horas de demora por la reparación, se vio obligado a conducir sin frenos, desconectados para poder corregir los daños. Este percance le obligó ayer a recuperar el tacto.

el resultado es "fantástico" El propio Sainz catalogó de "fantástico" el resultado de Alonso. "Está claro que poco a poco va cogiendo el ritmo a la carrera y está ahí arriba", señaló el madrileño, quien afirmó que el percance de Alonso el lunes "le puede pasar a cualquiera", para seguido destacar el "pundonor" del asturiano al ponerse a reparar el vehículo junto a su copiloto Marc Coma. "Lo de ayer -por el lunes- fue un poco sorpresa. Ya dije que estaba muy contento con el ritmo y las sensaciones que tenía. El resultado lógicamente fue la parte negativa y perder esas horas no era lo esperado, pero las sensaciones eran buenas y lo siguen siendo hoy -por ayer-", declaró el campeón del mundo de resistencia.

Por de pronto, Alonso dio un importante salto en la general. La segunda etapa la cerró en 48ª posición y ayer liquidó la jornada en la 32ª plaza. Si bien, la diferencia con respecto al líder ha aumentado de los 2h.38:53 a las 2h.40:24. El asturiano es el debutante mejor clasificado.

En el apartado de motos, y por tercer día consecutivo, también hubo un cambio en el liderato. El estadounidense Ricky Brabec se adjudicó la etapa y se elevó a la cima de la general. Fue un día idílico para Honda, que copó el podio con el norteamericano, el chileno Nacho Cornejo, segundo, y el castellonense Joan Barreda, tercero. Brabec atesora una ventaja de 4:43 sobre el argentino Kevin Benavides. El primer español es precisamente Barreda, cuarto, a 11:02.