Malen Osa completó el sábado en Ascona-Locarno (Suiza) su temporada más brillante en lo deportivo y, al mismo tiempo, más dura en lo personal. La corredora de Oñati acabó novena en la última prueba de las Golden Trail World Series, el circuito de carreras de montaña que organiza Salomon, el más prestigioso del mundo.
El noveno puesto en Suiza, unido a sus buenas actuaciones en Japón (quinta) y China (quinta), y, sobre todo, su segundo puesto en mayo en la Zegama, en su debut en un maratón, le auparon a la tercera plaza en la clasificación final (769 puntos), solo superada por la checa Judith Wyder (814 puntos) y la keniana Joyce Njeru (964 puntos), ganadora de las World Series.
Malen Osa protagonizó una emotiva llegada a meta en Ascona-Locarno. A escasos metros de la meta, recogió una camiseta blanca con la inscripción “Beti zurekin, ama”. Con este gestó la oñatiarra homenajeó a su madre, Gurutze Ansa, fallecida en agosto.
“Ha sido un año súper duro y estoy orgullosa de cómo he llevado todo y cómo he luchado”, dijo Osa tras completar en dos horas y 20 minutos el duro recorrido de la carrera suiza. La oñatiarra, que con solo 21 años figura en la elite mundial de la especialidad, cierra su mejor año, no solo por su regularidad en el circuito de Salomon (en 2023 fue cuarta en la general final de las World Series) sino también por las prestaciones que ha ofrecido a lo largo de la temporada.
Suma un triunfo en la Aiako Mendi Lasterketa, un segundo puesto en la prestigiosa Dolomyhs Run Skyrace de Italia, un séptimo puesto en prueba de 15 kilómetros de la Ultratrail del Mont Blanc y una tercera plaza en la reciente Skyrhune de Azkaine.
En la carrera de Ascona-Locarno también participó la donostiarra Sara Alonso, que logró un notable quinto puesto y acaba las World Series en la décima posición pese a haber disputado solo las pruebas de Japón y China y la de este fin de semana, ya que se perdió la Zegama a última hora por enfermedad.
