Un 0-4 con dos precedentes
LIGA ACB EL GBC YA ABRIÓ ASÍ EL CURSO EN | 2012 y en 2013; un año acabó quinto y el otro, penúltimo
donostia - La derrota ante el FC Barcelona dejó al Gipuzkoa Basket con un balance de 0-4, en penúltima posición de la tabla y como uno de los dos únicos equipos, junto con el Sevilla, que no conoce aún la victoria en el primer mes de competición. Un inicio malo pero que este club, que cumple su octava campaña en la Liga ACB, ya ha vivido más veces. Concretamente dos, además en temporadas consecutivas, la 2011-12 y la 2012-13, ambas con Sito Alonso en el banquillo. El mismo comienzo pero con desenlaces absolutamente opuestos.
En 2011, el proyecto de Sito no pudo comenzar peor, con derrotas ante Obradoiro, Valladolid, Unicaja y Estudiantes, esta última después de ir ganando por 16 puntos al descanso. El equipo reaccionó ganando en la quinta jornada al CAI Zaragoza y, aunque luego entró en otra dinámica negativa que le hizo llegar a la jornada diez con ocho derrotas, demostró la calidad que se le intuía ganando en la 11ª fecha al Joventut y comenzando entonces una brillante escalada que le llevó primero a la Copa del Rey luego al play-off por el título como quinto clasificado de la Liga Regular, en una temporada histórica y probablemente inigualable.
La siguiente campaña, tras una importante renovación de plantilla debido a la reducción de presupuesto y la consiguiente marcha de los mejores jugadores, trajo consigo otro comienzo muy negativo, saldado de nuevo con un 0-4 tras los tropiezos frente a Joventut, Estudiantes, Bilbao Basket y UCAM Murcia. La racha negativa se amplió una semana más con un revés contra el Fuenlabrada que dejó el balance en un 0-5. El primer triunfo llegó una semana después en Manresa (88-89) pero no enderezó ni mucho menos el rumbo del curso, que acabó con la penúltima posición y solo ocho victorias en 34 jornadas.
unicaja y andorra Las dos experiencias previas con pleno de derrotas en el primer mes de Liga Regular permiten, por tanto, apreciar con mayor perspectiva este 0-4 inicial. Por un lado, la temporada acaba de comenzar y el GBC tiene por delante 30 jornadas para enderezar el rumbo. Su margen de mejora es grande porque es difícil hacerlo peor que hasta ahora y al menos contra el Barcelona se apreció una importante mejora en la faceta defensiva.
Sin embargo, por ahora las sensaciones se asemejan más a las de la temporada 2012-13 que a la anterior: muchos cambios de jugadores, una plantilla a priori muy justa y poca capacidad para competir en las primeras fechas del campeonato. Y es que más allá de las derrotas, justificables también por un duro calendario, preocupan más las formas del equipo, que ha perdido los cuatro encuentros por 17, 14, 16 y 14 puntos, dando una imagen bastante pobre.
Reaccionar este próximo domingo se antoja difícil teniendo en cuenta que toca visitar al invicto Unicaja, así que el duelo frente al recién ascendido Andorra a Illunbe el 8 de noviembre se intuye clave.