Arretxe II se lleva un duelo explosivo
Bate en eibar al campeón de segunda, mendizabal III Hace valer su experiencia y recibe como premio un enfrentamiento con Titín III en los octavos de final
Duración 44:24 minutos; 10:39 de juego real.
Saques 1 de Arretxe II (tanto 5) y 2 de Mendizabal III (tantos 9 y 11).
Faltas de saque 2 de Mendizabal III.
Pelotazos 247.
Tantos en juego 12 de Arretxe II y 7 de Mendizabal III.
Errores 4 de Arretxe II y 7 de Mendizabal III.
Marcador 0-1, 1-1, 3-1, 3-3, 8-3, 8-5, 9-5, 9-6, 12-6, 12-7, 14-7, 14-11, 15-11, 15-12, 18-12, 18-13 y 22-13.
Incidencias Partido correspondiente a los dieciseisavos de final del Cuatro y Medio de la LEP.M disputado en el frontón Astelena de Eibar. Ejercieron de botilleros Fernando Arretxe (con su hijo Iker) y José Mari Mendizabal (con su hijo Aitor).
donostia. Iker Arretxe salió triunfador del explosivo duelo que mantuvo ayer con Aitor Mendizabal en el frontón Astelena de Eibar y obtuvo como premio un enfrentamiento con Titín III en los octavos de final del Cuatro y Medio de la LEP.M. El delantero de Luzaide se deshizo del campeón de Segunda en un partido en el que el hijo de Fernando Arretxe hizo valer su mayor experiencia para batir a un rival al que le traicionaron los nervios en algunos momentos. Sobre todo, en los decisivos.
La última eliminatoria de dieciseisavos de final de la jaula se jugó a tumba abierta. Se dejaron la piel en la cancha los dos protagonistas del duelo, aunque fue Iker Arretxe el que ganó la batalla. Pero tuvo que emplearse a fondo, la principal arma del delantero luzaidarra. Se clasificó para el torneo tras superar una comprometida previa ante Mikel Olaetxea (22-20) y ayer no desaprovechó la oportunidad de subir un escalón en el campeonato.
Tras un inicio con igualdad máxima en el marcador (3-3), Iker abrió brecha (8-3), una ventaja que fue ampliando con el paso de los minutos y los tantos (14-7). Arretxe II se encontraba cada vez más asentado sobre la cancha del Astelena y ya había cubierto un trecho muy importante de su camino hacia los octavos de final. Pero le faltaba aún un tramo escabroso en el que Mendizabal III sacó su casta a relucir para reducir distancias (14-11). El delantero de Antzuola se metía de esta forma en la pelea por la victoria. Pero fue entonces cuando los nervios le traicionaron. Se quedó corto en un saque y perdió la iniciativa (15-11). Y cometió el mismo error con el disparo inicial instantes después. Estaba de nuevo cerca de Iker (15-12), pero se le fue la mano con el saque y se pasó de la distancia (16-12). Cavó así su propia tumba y su rival le enterró.