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Galicia reivindica su foto en los despachos

La delegación gallega impugna el triunfo de Gipuzkoa por supuesta alineación indebidaDenuncia que Zumaia excedió el cupo de tres "foráneas" al bogar con tres ondarrutarras, una de 16 años, y una castreña

Donostia. El agitado desenlace de la Liga EuskoTren no finalizó el pasado domingo en Zarautz, sino que continúa en los despachos. La delegación de Galicia ha impugnado la victoria del combinado de Gipuzkoa, representado por las remeras de Zumaia, por supuesta alineación indebida del club zumaiarra. Las gallegas consideran que las guipuzcoanas excedieron el límite máximo de tres deportistas que no estén empadronadas en un municipio del territorio al que representan, al haber bogado con dos remeras y una patrona de Ondarroa y con una proel de Castro, lo que contraviene el artículo 15.2 de la normativa.

El comité de competición de la ACT deberá estudiar todas las diligencias, tanto la documentación presentada por Galicia como las posibles alegaciones de Zumaia. Su sentencia podría privar a Gipuzkoa de su victoria en la Liga EuskoTren.

Por el momento, la ACT ha desestimado otra impugnación previa procedente de Galicia, en la que consideraban que se había interpretado de forma errónea la normativa de competición a la hora de deshacer el empate a puntos y victorias entre Galicia y Gipuzkoa. La asociación ya aseguró el pasado domingo que el reglamento es "claro y conciso", después de que primero se hubiera proclamado como campeonas a Galicia y luego se rectificara para coronar a Gipuzkoa. Ahora, Galicia reivindica su fotografía en el podio.

En Zumaia, admiten que "alineamos a tres de Ondarroa y una de Castro, como también lo hicimos en Moaña y nadie dijo nada porque fuimos segundas y no tuvo mayor trascendencia. Ahora, como ganamos, reclaman", explica Joseba Urbieta, técnico de Zumaia. Su alineación no puede interpretarse como un acto de malicia. Ni siquiera un error humano. Todo es fruto de la benevolencia con la que se ha aplicado el reglamento femenino, dado que los clubes, hasta ahora, han primado el hecho de que pudieran salir cuatro botes en una liga que ha supuesto un gran espaldarazo para las mujeres.

"En una asamblea previa, quedamos en que no se iba a mirar que no hubiera más de tres juveniles ni tampoco la procedencia. Se entendía que lo importante era reunir remeras. En Zumaia, estuvimos buscando a chavalas y dimos con tres de Ondarroa, un pueblo muy cercano, y, a través de un amigo, con una de Castro que quería remar", argumenta Urbieta.

En concreto, el artículo referido al empadronamiento se incluyó a fin de que, por ejemplo, una entidad pudiera hacerse con un número importante de catalanas, que son una referencia en el banco móvil. En la ACT, admiten que "hasta ahora, hemos hecho la vista gorda, porque entendíamos que lo importante era fomentar el remo femenino, aunque sí realizábamos un control para que nada se fuera de las manos". A la hora de la verdad, Galicia ha hallado un resquicio para reclamar el triunfo, que tiene visos de lograrlo si, como se prevé, se aplica el reglamento.

"Si hay que darles los maillots y el trofeo, lo haremos", dice Urbieta, que lamenta "el daño a las remeras. En radio y televisión, seguramente sin mala fe, he oído los nombres y apellidos de las chavalas. Algunas tienen 16 y 17 años y se ven en medio de la polémica y vienen al club llorando".

"Si remar con seis juveniles o una patrona de 16 años -de Ondarroa- es buscar ventaja para ganar...", se duele Urbieta. Esta situación se habría evitado si el entrenador hubiera montado en la popa de la Koruko Ama a su otra patrona, una zumaiarra de 18 años que bogó el sábado. "Las he alternado en las regatas para que tuvieran las mismas oportunidades. Confío en ambas. Les falta fuerza, pero es cuestión de tiempo". Todo apunta a que Gipuzkoa, representada por Zumaia y Getaria-Tolosa, se quedarán sin liga. "Para nosotros, el mayor triunfo es dar una oportunidad a las remeras y dar pasitos en el remo femenino. Y nadie nos privará de haber ganado en Zarautz a Galicia", concluye Urbieta.