El cómico Ángel Martín asegura que el mundo vive un momento en el que "hay muchísimo ruido" y en el que la gente trata de incendiar "cuanto más mejor" intentando que los demás se indignen por lo mismo sin escuchar a los otros, de forma que todo se convierte "en el juego del teléfono escacharrado".

Martín (Barcelona, 1977) publica este miércoles "Detrás del ruido" (Editorial Planeta), su segundo libro en el que describe todo aquello que le ha servido y le sirve para mantenerse en pie y no volver a caer en el agujero en el que le sumió un brote psicótico en 2017 y que le llevó a estar ingresado en un hospital psiquiátrico.

En una entrevista con EFE, asegura que se encuentra bien, que le escuece "cero" mirar al pasado, probablemente, porque ya lo "masticó" cuando escribió su primer libro "Por si las voces vuelven", en el que narraba en primera persona cómo se reconstruyó tras su ingreso.

Decidió volver a escribir a raíz de ver cómo en las firmas de su libro y a la salida de sus funciones, la gente se quedaba a hablar un rato con él y siempre le hacían la misma pregunta: "Cómo lo haces para que no se vuelva a ir todo al carajo".

"Pensé, voy a tratar de hacer lo mismo que hice con por 'Si las voces vuelven', es decir, voy a masticar, voy a ver qué es lo que estoy haciendo ahora, cómo me enfrento yo a las cosas, cómo funciona mi cabeza desde que pasó, lo que pasó por si a alguien le sirve de algo", cuenta el comunicador.

Advierte de que con esta obra no pretende sentar cátedra de nada: "Yo te cuento la movida que a mí me está funcionando por si a ti te funciona y la copies como si no hubiera un mañana", abunda.

Una "visita guiada" al interior de su cabeza

En este nuevo libro hace una "visita guiada" por el interior de su cabeza, una "especie de manual" sobre cómo se enfrenta él a las cosas, cómo toma las decisiones, como trata de que "de repente no se apaguen todas las luces" y la oscuridad se apodere de su cerebro.

"Si ves algo que te sirve, cógelo, llévatelo, cópialo y haz lo que quieras con eso", abunda.

Desde su propia experiencia es mucho más difícil salir del pozo que mantenerse de pie, pero ésto último requiere un trabajo de "infinita consciencia, coherencia, prudencia y calma", un juego mucho más a largo plazo, en el que el riesgo es aburrirse o cansarse.

"Pero, claro, el precio de aburrirte o cansarte es volver a ese lugar donde ya sabes que no hay fuerzas para después remontar, y es mucho más cansado. Entonces es un poco más inteligente tratar de trabajar en el largo plazo", sostiene.

Tomar decisiones, porque "estamos metidos en una espiral en la que no nos planteamos muy bien las decisiones que tomamos", aprender a distinguir lo que quieres de lo que necesitas, pero entre otras claves, hay que empezar "por poner un poco de orden de verdad en tu vida", señala.

Subraya que todos sabemos las señales de que las cosas no van bien, pero insiste en que no hay que dar por sentado que estar mal forma parte de estar vivo. Ante la primera señal de alarma, continúa el cómico, hay que frenar.

"El problema es que creemos que la prioridad es mandar el mail y la prioridad es resolver lo que te está haciendo sentir mal. El mail puede esperar", recalca.

A su juicio, para ver más luces que sombras en el mundo que nos rodea hay que hacer un ejercicio "muy salvaje" de dónde centrar la atención, porque "estamos en un momento donde lo que hay es muchísimo ruido".

"Todo el mundo en todas partes trata de incendiar, cuanto más mejor, todo es incendio, y hay muy poca gente tratando, no te digo apagar, pero simplemente con no incendiar más sería suficiente", opina.

Con las redes, agrega el cómico, la gente comparte mucha indignación tratando de que el resto se indigne por lo mismo, al mismo tiempo y en el mismo nivel, y si no lo haces todo se convierte "en una batalla", en la que todo es blanco o negro, y nadie escucha al otro.

"Es como el juego del teléfono escacharrado", incide Martín.

"Detrás del ruido" es un libro que espera que sirva también a los jóvenes porque va dirigido a todo el mundo, haya leído más o menos.

Pero también porque le aterra ver a chavales con problemas de encontrar sentido a vivir.

"Hablamos de los jóvenes como si fuera una cosa de que he ido a la montaña esta mañana y me he encontrado seis millones de criaturas nuevas que no sé de dónde salen. Los has traído tú, tronco, los has traído tú, los hemos traído nosotros aquí y los estamos educando nosotros, si están peor que nunca, nosotros lo estamos haciendo peor que nunca", sentencia.

Por último, a la pregunta de qué noticias le gustaría dar en su "informativo matinal para ahorrar tiempo", Martín lo tiene claro: "Que Taylor Swift ha ampliado entradas para sus conciertos".

Y es que para el cómico, el humor "sirve para todo".