- El flautista y saxofonista Jorge Pardo no recuerda cuántas veces, ni en cuántos proyectos colaboró con el pianista Chick Corea, fallecido el pasado mes de febrero. Hoy, acompañado por Niño Josele (guitarra flamenca), otro estrecho colaborador del músico estadounidense, Pardo le rendirá homenaje en el Kursaal en un concierto al que han denominado Mi querido Chick. "La calidad de Chick Corea no hace falta destacarla porque hablaba por sí misma. Yo destacaría su interés, su capacidad por aprender y su inquietud por no cerrar nunca el libro", explica Pardo.

El flautista y saxofonista y el guitarrista estarán acompañados por el pianista José de Josele y ofrecerán un concierto en el que expondrán la música de Corea, sí, pero desde un ángulo más flamenco y no tan jazzista. "Todos los que participaremos tenemos un lenguaje muy propio que no se significa únicamente con una tradición. El concierto será un retrato de lo que era el Chick más ibérico", relata Pardo.

El de esta tarde, no es el único reconocimiento que se brindará al pianista en el Jazzaldia, festival al que fue muy asiduo desde su primera participación en 1981 -hasta el año 2018, Chick Corea tocó hasta en diez ediciones del encuentro jazzístico donostiarra-. No en vano, Chucho Valdés, amigo y también colaborador del compositor de Armando's rhumba, también tuvo un recuerdo para el fallecido ayer en su concierto de la plaza de la Trinidad.

Lo que Pardo sí que recuerda de forma nítida es cuándo conoció personalmente a Corea. Él era "un principiante", el pianista, en cambio, ya era "un gran músico" del que no habían llegado al Estado demasiados discos todavía. Fue a mediados de los 70, cuando el estadounidense giraba con la banda Return to Forever. Esta formación actuó en el Teatro Monumental de Madrid y era la época en la que el flautista, galardonado el año pasado con el premio Donostiako Jazzaldia, era parte del grupo Dolores, del que también era miembro el músico Pedro Ruy-Blas. Este contactó con Chick y con la banda y se fueron hacer una jam session al club Balboa Jazz. "Conectamos enseguida", recuerda el músico. La conexión fue personal y musical, tanto Corea se interesó por el flamenco. "Lo llevamos a El Corte Inglés a comprar varios long plays de flamenco", ríe.

Pero, ¿qué era lo que le resultaba tan atrayente del flamenco? "Lo que le fascinaba a Chick del flamenco es lo que nos fascina a todos, el misterio que tiene, esos sonidos negros que dibujaba con palabras Lorca. Ese misterio que tiene entre la música oriental y la occidental, ese cruce único. Sus armonías, sus giros melódicos, su compases... Le fascinaba porque le costaba trabajo descifrarlos. Es una música muy compleja que cuesta descifrar hasta a los grandes músicos".

El lenguaje de Chick Corea

El interés de Chick Corea por todo el conocimiento posible, explica Pardo, responde a su interés de que ese conocimiento fuese parte de su lenguaje: "Si observas su música, ya sea un standard de jazz, una de sus composiciones más barrocas... siempre le escuchas. Estás escuchando al mismo músico, en distintos contextos y con sutilezas diferentes en su lenguaje, pero siempre estás escuchando su lenguaje".

Un ejemplo de ese "espíritu" que recogió e hizo suyo es el que se puede percibir en The Spanish Heart Band, el último proyecto en el que Pardo, Niño Josele y Corea colaboraron juntos, y en el que el pianista quiso redescubrir los ritmos latinos. Previamente, en la década anterior, el flautista ya había girado durante un par de años como miembro de la banda del pianista: "Esas dos fueron los proyectos más gordos en los que colaboré con él".

The Spanish Heart Band, en la que además de Pardo y Niño Josele también participaron Niño de los Reyes (bailaor), Marcus Gilmore (batería), Carlitos del Puerto (bajo), Steve Davies (trombón), Luisito Quintero (percusión y Michael Rodríguez (trompeta), publicó en 2018 su disco Antidote y en 2020 se hizo con el premio al Mejor álbum de jazz latino y, recuerda Pardo, Corea tuvo un bonito detalle con todos los componentes del conjunto: tuvo la amabilidad de enviar a cada uno de los nueve componentes un trofeo de los Grammy. El regalo se lo devolverán hoy desde el escenario del Kursaal.