donostia - El tenor mexicano Javier Camarena, uno de los más aplaudidos en la actualidad, iniciará el sábado en el Gran Teatro del Liceu de Barcelona una gira por varias ciudades del Estado, entre ellas Donostia, a la que llegará el próximo día 23. Camarena se subirá a las tablas del Kursaal para ofrecer un programa muy centrado en el repertorio francés, en una muestra de lo que será su carrera en los próximos cinco años.

Acompañado por el pianista Ángel Rodríguez, interpretará, asimismo, obras del repertorio italiano, en un recorrido en el que incluirá arias como Ah! mes amis, de La fille du régiment, de Donizetti, que en el Metropolitan de Nueva York, en el mismo Liceu y en el Teatro Real, han sido objeto de históricos bises.

El tenor presentó ayer su gira en la capital condal junto con el director artístico del coliseo de la Rambla, Víctor García de Gomar. Camarena rememoró que en los quince años que lleva de trayectoria ha estado muy volcado en el belcantismo y, ahora, sin dejarlo de lado, cree que es "un paso lógico buscar la parte del repertorio francés, con las bases técnicas que tengo".

El mexicano ha vendido todas las entradas para Barcelona, mientras que para la cita de Donostia apenas queda una treintena. Posteriormente viajará a Oviedo, Valencia, Madrid y Málaga, donde el 31 de enero ofrecerá un recital lírico con la Orquesta Filarmónica de Málaga, que incluirá piezas de Manuel García.

Para el tenor, el repertorio francés es "mucho más introvertido, sus emociones son más contenidas, no es tan explosivo como el italiano". "Esta contención de la emoción y el poner en un lugar preponderante la parte musical y melódica es un reto bastante interesante. Además, es ir encontrando nuevos retos par aplicar lo aprendido en estos años", prosiguió el cantante.

Camarena dijo sentir una "gratitud muy grande" por el hecho de que en el caso de Barcelona se hayan vendido todas las entradas, lo que ha ocurrido anteriormente solo con Luciano Pavarotti y Jonas Kaufmann."En los recitales soy mucho más yo, soy muy de bromas, de platicar, dialogar con el público, así soy yo, no es hacer un show" y, aunque el programa es "superexigente ya hemos preparado algunas sorpresitas", apuntó.

La primera parte arrancará con L'amour! l'amour...Ah! Lève-toi soleil, de Romeo y Julieta, de Gounod, y proseguirá con piezas de Donizetti de La favorita, y con otra de Édouard Lalo.

En la segunda parte, el mexicano atacará È serbato a questo acciaro... L'amo tanto, e m'è si cara..., de Capuletos y Montescos, de Bellini, así como el Tombe degli avi miei... Fra poco a me ricovero, de Lucia di Lammermoor.

El clímax llegará con M'apparì tutt'amor de Martha, de Friedrich von Flotow, antes de poner el punto final con Lunge da lei... De'miei bollenti spiriti... O mio rimorso, de La traviata, de Verdi.

El tenor, natural de Xalapa, afirmó que le gusta mucho este tipo de recital con piano, porque "permite crear una atmósfera muy íntima, tener una retroalimentación con el público".

Preguntado sobre qué siente cada vez que el respetable le demanda un bis, el tenor respondió que para él supone "una realización, porque la misión del cantante es comunicar a través del canto, transmitir las emociones de lo que les ocurre a los personajes y lograr esa emoción, esta comunicación con el público, es lo que más me llena de satisfacción". - Efe