Madrid. Desde que rompió su matrimonio con el torero Sebastián Palomo Linares se ha especulado sobre su situación personal. Y aunque Marina Danko afirmara que su vida había dado un giro de 180 grados, la presión ha podido con ella y ha reconocido, entre lágrimas, que lo está pasando muy mal. No es un buen momento para la exmujer de Sebastián Palomo Linares. Pese a que ha rehecho su vida sentimental con su primo Celio, sigue cargando con las consecuencias de haber dejado atrás 34 años de matrimonio y de haber comenzado desde cero.
Marina Danko dio la cara ante los medios el miércoles, aprovechando la presentación de una conocida marca de adelgazantes de la que es ahora imagen. La diseñadora aceptó hablar de su situación actual por un contrato de aproximadamente 18.000 euros con esta firma de productos dietéticos. "Trabajo porque lo necesito. Yo he empezado de cero. He salido de la que fue mi casa sin nada", admitió Marina Danko a Vanitatis. "Al principio no contesté a nadie porque me sentía mal, luego di una exclusiva en Hola, que sentó muy mal a la gente. Hay que imaginarse cómo debía de estar yo en ese momento para dar una exclusiva. Yo tengo que seguir adelante y además tengo que mantener a mi hijo Andrés, que todavía está estudiando y vive conmigo en Madrid".
La diseñadora reconoce que su situación actual no es fácil y se derrumbó al confesar que tiene problemas económicos y que lo está pasando muy mal con su divorcio. Sus lágrimas se acrecentaron al recordar la ruptura con el que fue su marido durante 34 años. Aunque se niegue a mencionar los verdaderos motivos de su ruptura con el matador, Marina Danko afirmó que su relación peligraba desde hacía tiempo: "Yo llevaba sufriendo mucho tiempo. Concretamente, cuatro años de sufrimiento".
Con energías renovadas, la exmujer del diestro tiene nuevos proyectos y prefiere no mirar atrás, aunque reconoce que le duelen los comentarios de su ex. "Si alguien le ha querido he sido yo, si alguien le ha cuidado he sido yo", añadió en El programa de Ana Rosa.