Un bidegorri por la mitad de la empresa

En Legazpi tenemos un precioso bidegorri pero que distorsiona las tareas diarias de los trabajadores y trabajadoras de CIE Legazpi y pone en serio peligro a todas las personas que discurren por el. A diario nos encontramos con gente que pasea por las zonas en las que pasan camiones, carretillas elevadoras, etc. Cada vez más a menudo se producen incidentes y frenazos. Hasta que algún día ocurra una desgracia. Desde el Comité llevamos más de 5 años pidiendo a la empresa que tome cartas en este asunto y exigiendo que ponga fin a un gravísimo riesgo de accidente fatal. En marzo el Comité de Empresa pidió una reunión con Alcaldía. Al no tener respuesta a la petición de reunión, nos acercamos para saber el motivo por el cual no se nos daba audiencia, a lo que respondieron convocando una reunión para el 20 de junio. El día 19 de junio, justo un día antes del concretado, recibimos la llamada del Ayuntamiento diciéndonos que no hay motivo para celebrar la reunión. Que hablemos con la Dirección de la empresa, que es la que está en contacto con la Diputación. ¿Para decirnos eso han tenido que pasar tres meses? Llevamos años hablando y reclamando a la Dirección de la empresa una solución para este problema. La Dirección de la empresa nos remite a las instituciones. Entre las instituciones se pasan la pelota unos a otros. Mientras tanto paseantes, menores escolares, bicicletas, camiones y carretillas elevadoras se encuentran en un mismo espacio con un grave riesgo para su integridad. ¿Cuánto tiempo más va a pasar antes de tomar medidas? ¿Vamos a esperar a que ocurra un accidente grave? ¿Qué va a pasar con el o la trabajadora que atropelle a un menor? ¿Y con su familia? ¿Y con las instituciones que echan balones fuera?