A ti y a todas las mujeres asesinadas por hombres, que no aceptan un no como respuesta. Cuando me dijeron que habían matado a una mujer en sanfermines pensé: ¿Por qué? Poco a poco me fui enterando de lo que ocurrió. Un sudor frío recorrió mi cuerpo al escuchar el nombre de quien lo hizo. Mis primeras palabras fueron: ¿Por qué? Yo conocí a ese muchacho, compartió algún cumpleaños con mi hija, y era un niño muy simpático. ¿Qué te ocurrió, Diego? Desde ese día una respuesta ronda mi mente. Nadie en tu vida te había dicho un no. Ella lo hizo y tú le arrancaste la vida. A esa madre que sufre como nadie lo que tú hiciste, quisiera decirle que cada día de mi vida seguiré pidiendo justicia para Nagore. Y a ti, Diego, pido a Dios que algún día seas capaz de decir la verdad por Nagore a su familia y a toda la sociedad.
- Multimedia
- Servicios
- Participación
