La máquina de limpieza
Son la siete menos cuarto de la mañana del Día de la Virgen, por lo tanto día festivo. Hoy, como tantos otros días festivos, me despierto debido al ruido de la máquina de limpieza del Excmo. Ayuntamiento de San Sebastián. Al ruido propio de la máquina hay que añadirle el pitido que emite la misma al ejecutar diversas maniobras. Y no me refiero a una pasadita de unos minutos, tarda más de 20 minutos en terminar su labor, suficiente para desvelar a cualquiera. Y cuando no es la típica máquina con los dos cepillos delante nos despiertan con un soplador de esos que van moviendo la basura con aire. ¿Se imaginan que su vecino de arriba se pusiera a aspirar su casa a las 6.30 de la mañana? ¿Estará respetando el Ayuntamiento la normativa de ruidos vigente?
En 24 horas que tiene el día, ¿no hay otra hora más apropiada para limpiar con dichas máquinas? y si no la hubiere, devolvámosle el protagonismo a la escoba y el recogedor y respeten el merecido descanso de los vecinos. La cultura empieza con el respeto.