DONOSTIA - Un joven marroquí de 18 años, residente en una vivienda que el Departamento de Políticas Sociales del Gobierno Vasco dispone en Gipuzkoa, falleció ayer en su habitación al parecer víctima de un suicidio.

"Todo apunta a que la víctima K.M. se habría quitado la vida en el escaso intervalo de 15 minutos que se quedó solo en la habitación" de la "vivienda de autonomía" o "unidad convivencial" en la que residía, ha informado el Departamento vasco de Políticas Sociales en un comunicado.

Fue un monitor del piso quien le encontró, aún con vida, por lo que intentó reanimarle junto a otro residente de la vivienda, aunque el joven falleció pocas horas después.

El chaval residía en este piso desde el pasado mes de diciembre, después de haber estado en el centro de internamiento de menores de Ibaiondo, en Zumarraga.

El Gobierno Vasco ha iniciado ya los trámites para proceder a la repatriación del cadáver a Marruecos para ser entregado a su familia, que reside en el país africano.

Los profesionales del sistema vasco de Justicia Juvenil se mostraron ayer desolados por el fatal desenlace.

La consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales, Beatriz Artolazabal, ha acudido este lunes a la vivienda donde se produjeron los hechos para transmitir el pésame a sus residentes y profesionales.

"Quiero subrayar todo mi apoyo al equipo profesional de nuestros centros educativos. Estamos todos conmovidos", ha dicho la consejera, quien ha reconocido que ha sido un duro golpe para todos.

"Llevamos más de 30 años trabajando con menores y con jóvenes y puedo asegurar que es uno de los días más duros para todos los profesionales que se dejan la piel en ayudar a estos chicos y chicas", ha reiterado.

Artolazabal se ha reunido posteriormente con los portavoces de Justicia de los grupos parlamentarios para ofrecerles toda la información que dispone sobre este fallecimiento.

La consejera les ha transmitido que el Gobierno Vasco se reafirma "en los principios educativos y restaurativos" del sistema de justicia juvenil.

Precisamente, el pasado mes de marzo se presentó el quinto Plan de Justicia Juvenil 2020-2024, dotado con un presupuesto de 100 millones de euros, que apuesta por la prevención a través de la reeducación.

Los planes anteriores han puesto de manifiesto la paulatina disminución de la delincuencia juvenil y de la tasa de reincidencia global, que se sitúa por debajo del 20 %, ha precisado la fuente.

Asimismo, se confirma la consolidación del modelo de intervención en medio abierto y la cada vez mayor utilización de los procesos de conciliación y reparación frente a las medidas firmes.

En la actualidad, Euskadi dispone de 131 plazas en siete centros educativos, mientras que en los servicios de medio abierto se atiende a 48 jóvenes con medidas de tipo formativo y educativo.