La Diputación de Gipuzkoa ha activado la licitación de la redacción del proyecto de trazado de la nueva variante de Zarautz, una obra que tras muchos obstáculos comenzará a hacerse realidad durante el segundo semestre de 2023. Este primer concurso tendrá un presupuesto de 102.000 euros y un plazo de ejecución de cinco meses.

La variante, que tendrá dos carriles, se iniciará en la rotonda del peaje de la A-8. Con una longitud aproximada de 1.250 metros, cruzará la autopista por debajo del viaducto de Asti, para unirse en la rotonda con el actual camino de Asti. El final del nuevo tramo a construir se situará en la llegada al polígono Errotaberri.

Este proyecto permitirá aligerar de forma significativa el tráfico del casco urbano, ya que todo el tráfico proviniente de la AP-8 y de Orio y que tenga como destino el polígono industrial no tendrá que atravesar el municipio.

No es el primer paso que se da con este objetivo y es que en los últimos años, han sido varias las obras ejecutadas a fin de sacar vehículos del centro de Zarautz. En este sentido, la diputada de Infraestructuras Viarias, Aintzane Oiarbide, ha recordado las obras recientes como la apertura del nuevo vial de acceso desde Frantzesbidea en marzo de 2021, la conexión de Errotaberri con el casco urbano de Aritzbatalde, la renovación del cajón de Frantseskua y la conexión con el camino de Aitza Auzoa . “Con la variante, sacaremos a todos esos vehículos de la trama urbana, y además, los y las zarauztarras que viven entre las vías del tren y la autopista podrán realizar de manera más directa el acceso a sus domicilios”, ha celebrado.