El incremento de contagios por covid-19 ha obligado a activar las pruebas salivares de PCR al personal trabajador de las residencias de mayores del territorio. Estas muestras, que son complementarias a las que se vienen realizando habitualmente, se llevan a cabo cuando la incidencia acumulada en el territorio supera los 150 casos, tal y como marca el protocolo de vigilancia y control del covid en los centros residenciales.

La diputada foral de Políticas Sociales, Maite Peña, ha señalado este miércoles que la actual situación sanitaria exige ser muy cautos. “Seguimos extremando las medidas sanitarias, empezando por la prevención. La experiencia nos ha enseñado que cuando la incidencia aumenta en la comunidad, el riesgo de que el virus entre en las residencias se multiplica, porque son espacios abiertos y conectados con la comunidad. Por eso hace falta reforzar las medidas de seguridad, para que sigamos protegiendo a las personas más vulnerables”.

PROTOCOLO DE ACTUACIÓN

El departamento de Salud del Gobierno Vasco publicó el pasado 18 de octubre la última actualización del Protocolo de para la Vigilancia y Control del covid en residencias y centros sociosanitarios. Siguiendo sus indicaciones, la Diputación Foral de Gipuzkoa ha activado las pruebas PCR salivares de diagnóstico para las personas trabajadoras, y que son complementarias a las PCR rutinarias que se siguen realizando en los centros residenciales.

El personal de las residencias, siguiendo un calendario preestablecido, tendrá que realizar una prueba diagnóstica salivar cada 15 días en el caso de estar vacunado. Según ha precisado la Diputación, en el caso del personal no vacunado, la prueba será semanal.

Estas pruebas diagnósticas se realizan a primera hora de la mañana, cada persona se toma su propia muestra y la entregan en la residencia, o en el propio centro de salud en casos puntuales, para su análisis en el laboratorio.

Según los datos recabados por la Diputación, en octubre, el 96% de las personas usuarias ha recibido las tres dosis de la vacuna contra el covid, y el 91% de las personas trabajadoras también está vacunada.