- Aunque las vacunas han logrado doblegar la curva de la mortalidad, el ascenso vertiginoso de nuevos casos ha vuelto a recrudecer la situación con catorce nuevos fallecidos en Euskadi entre el 26 de julio y el 1 de agosto. Es el peor balance del último mes, ya que una semana antes se habían notificado diez y las semanas precedentes los datos habían mejorado sustancialmente hasta el punto de constatarse quince días sin ninguna persona fallecida.

La evolución de la pandemia vuelve a dar una de cal y otra de arena porque el martes volvió a rebasarse el millar de contagios con 1.086 nuevos casos de coronavirus y aumentó la tasa de positivos al 11,5%. Estos datos suponen un incremento de 179 nuevas infecciones y de dos puntos en el porcentaje de positivos en relación a las pruebas practicadas en la jornada del lunes.

Por contra, la transmisión comunitaria del virus indica una leve mejoría en la evolución de esta crisis sanitaria, ya que la incidencia acumulada en catorce días mantiene la tendencia descendente y se sitúa en 817 casos, 22,5 puntos menos en solo 24 horas. No conviene olvidar que la semana pasada, exactamente el 29 de julio, había escalado hasta 870 casos, el máximo histórico en 16 meses.

No obstante, después de varias semanas con la curva apuntando claramente hacia abajo, vuelve a constatarse un repunte en los decesos. Durante la primera quincena de julio, no hubo que lamentar fallecimientos con covid como causa directa. Y posteriormente, en las dos siguientes semanas, se notificaron seis y diez, respectivamente.

Con ellos, son ya 4.466 las muertes totales en Euskadi en la pandemia, el 1,81% de los 246.404 casos totales diagnosticados. De todas las víctimas mortales registradas, 165 tenían menos de 60 años (entre ellos un menor de diez años con otras patologías previas, tres contaban entre 20 y 29 años y doce, tenían entre 30 y 39 años).

Los porcentajes de letalidad son dispares según las OSI y se sitúan entre, por ejemplo, el 0,6% de la zona de salud de Azpeitia, una de las más bajas de toda Euskadi, o el 4,9% del área de Abetxuko, una de las más altas.

Con los últimos datos, tampoco los hospitales parecen abonados al optimismo. A pesar de que se ha ralentizado el incremento de los casos activos, las hospitalizaciones siguen en aumento. El martes, nada menos que 72 vascos precisaron ingresar por complicaciones derivadas del coronavirus, lo que supone 16 más que un día antes, y permanecen en planta 266. A ellos, se suman otros 61 enfermos con cuadros muy graves por esta afección que están ingresados en las unidades de cuidados intensivos, un volumen que se mantiene prácticamente estable desde hace varios días.

En total, permanecen hospitalizados 327 pacientes con covid en estos momentos, 24 más que el lunes. En el caso de los hospitales, no había tantas personas ingresadas con covid desde el pasado 24 de mayo.

En esta oleada, el número de pacientes que ha necesitado ingresar es muy inferior a la de los embates anteriores, pero sigue la secuencia habitual. Es decir, primero aumentan los contagios y días después sube la presión sobre los hospitales.

Entre todos los nuevos infectados, más de 500 tenían entre diez y 29 años. Y es que la alta contagiosidad de la variante delta ha propiciado esta explosiva quinta ola entre los más jóvenes, los últimos en recibir el antígeno. De hecho, por edades, destacan de nuevo los contagios en la franja de entre diez a 19 años, con 242 positivos, y de entre 20 y 29 años, con 270. En estos colectivos la tasa de incidencia acumulada es de 2.275 y 2.509, respectivamente. Teniendo en cuenta solo a los jóvenes de 17 y 18 años, la transmisión se dispara a 4.769, lo que provoca que Euskadi tenga una de las mayores incidencias del virus entre adolescentes.

También superan el centenar de casos el colectivo de 30 a 39 años, con 115 casos; la población de 40 a 49 años, con 103 contagios; y las personas de entre 50 y 59 años, con 117 positivos. Los menores de nueve años presentan 92 positivos y, además, se han dado 65 contagios de personas de 60 a 69 años, 38 en la franja de 70 a 79 años, 29 en la población de 80 a 89 años y trece en mayores de 90 años. La tasa de incidencia más baja se da entre los septuagenarios.

Este repunte se produce justo cuando Euskadi ha superado el 70% de su población inmunizada con la pauta completa. En total, 1.390.428 vascos han finalizado la pauta de vacunación contra el covid-19, bien con las dos dosis de AstraZeneca, Moderna y Pfizer o con la monodosis de Janssen. Al mismo tiempo, 1.516.803 personas, el 76,7%, han recibido al menos una dosis. La tasa de personas con pauta completa supera el 90% entre los mayores de 60 años y el 80% en la población de 40 a 59 años, mientras que ronda el 50% en la franja de 30 a 39 años y es del 18% de 20 a 29 años.

Sin embargo, aún habiendo sobrepasado ya ese umbral genérico del 70% que hacía vislumbrar la inmunidad de rebaño, ahora resulta evidente que no será suficiente para acabar con la pandemia.

La pandemia sigue presentando cifras malas en la CAV pese a que el 70% de la población diana ya se encuentra inmunizada