La Ertzaintza y las policías locales han reforzado sus "operativos especiales de prevención" para, de forma "conjunta y coordinada", velar por el cumplimiento de la normativa sanitaria anticovid y, en particular, impedir la práctica de botellones y aglomeraciones de personas en espacios públicos.

El Departamento de Seguridad ha difundido este viernes un comunicado en el que informa del refuerzo de sus dispositivos preventivos y pide "responsabilidad y colaboración" a los vascos, al igual que han hecho en Donostia el jefe de la Ertzaintza, Josu Bujanda, y el comisario jefe de la Guardia Municipal donostiarra, José Anta, quienes han respondido a preguntas de los periodistas tras reunirse en la capital guipuzcoana.

Bujanda ha asegurado que la policía autonómica y las locales mantienen una "plena colaboración y coordinación" para hacer cumplir "comportamientos cívicos" que eviten la expansión de la covid-19, para lo cual trabajan "de forma coordinada" en "operativos conjuntos".

"Lo hacemos en patrullas mixtas" o "distribuyendo a cada cuerpo por zonas" en un mismo municipio, para "intentar que la ciudadanía cumpla las normas reguladas por los decretos del lehendakari", ha indicado.

En los pueblos pequeños sin Guardia Municipal, las labores se desarrollan mediante "patrullas de la Ertzaintza" que trabajan de forma "planificada" para "optimizar recursos".

El máximo responsable de la policía autonómica ha afirmado que "la Ertzaintza refuerza (la vigilancia) todos los veranos y, por ejemplo, en los días de las "no fiestas" sus comisarías, "conjuntamente con policía local", hacen "un esfuerzo y, efectivamente, se refuerza el servicio".

Efecto disuasorio

Respecto al uso de mascarillas, ha señalado que el nuevo decreto de medidas dictado ayer por el lehendakari, que ha entrado hoy en vigor, marca "con más rigor" su uso y eso permitirá hacer "una prevención con rigor" en aquellos espacios donde suele congregarse gente.

En cuanto a la recomendación de evitar la movilidad entre las 00.00 y las 6.00 horas, Bujanda ha indicado que las policías "lo que harán será recomendar" y hacer "pedagogía".

El jefe de la Ertzaintza ha reconocido que, "como en todas las organizaciones", los agentes de ambos cuerpos también disfrutan en verano de periodos vacacionales, pero enfrentan esta circunstancia a base de "optimizar los recursos y coordinarse de manera eficiente".

Ha admitido no obstante que la pasada noche y madrugada se han vuelvo a producir aglomeraciones de jóvenes consumiendo bebidas alcohólicas en el municipio de Plentzia (Bizkaia), donde las policías vasca y local "actuaron" reforzadas por la Brigada Móvil y mediante "sirenas y megafonía" lograron que "la gente se fuera dispersando" en grupos que "ya cumplían la normativa vigente".

En su opinión, los expedientes de sanción interpuestos durante el primer estado de alarma cuya validez ha cuestionado recientemente el Tribunal Constitucional, "evitaron sin duda que el virus se propagase" más en aquel momento, debido a que las denuncias, además de afectar al denunciado, cumplen un "papel de ejemplaridad y disuasión" al resto.

Bujanda ha recalcado el trabajo coordinado que desempeñan las policías en Euskadi, pues además de las mesas de coordinación generales, todas las semanas se reúnen los jefes de demarcaciones de la Ertzainza con los de las policías locales de los municipios para "concretar específicamente los operativos de los fines de semana" o "planificar dispositivos específicos".

Cierres de espacios

Jon Anta por su parte ha subrayado que "durante esta tan larga y triste pandemia" la Ertzaintza y las guardias municipales tienen "contacto absolutamente permanente, en todos los niveles operativos y jerárquicos".

"Las policías vascas -ha dicho- estamos siendo la punta de lanza preventiva y pedagógica del sistema de emergencias de Euskadi".

Preguntado por el hecho de que en Donostia no se hayan cerrado o acotado zonas en las que con frecuencia se hacen botellones, ha asegurado que "en la medida en que estos espacios se utilicen indebidamente", la Guardia Municipal "procede a cerrar" y "una vez que se restituye la normalidad del uso, se vuelve a reabrir".

El jefe de la Policía donostiarra ha hecho un llamamiento especial a los jóvenes a cumplir las restricciones y ha advertido de que, tras agotar "los medios pedagógicos", en los casos de "negativas reiteradas o muy malas actitudes", los agentes sancionarán.