Tras realizar sus estudios de Ingeniería en Tecnologías Industriales en Tecnun, obtuvo una beca para realizar su Proyecto Fin de Máster en el prestigioso Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT). Hoy en día está trabajando en un proyecto de la División de Heliofísica de la NASA, donde contribuirá en poner en marcha un satélite para el análisis de la radiación del Sol. Gracias a su labor como ingeniero, Iker Liceaga ha sido premiado dentro de la categoría de Ingeniería y Energía por Nova Talent, la red global que identifica a los jóvenes más brillantes.

De Tecnun al MIT, y del MIT a la NASA. ¿Cómo logró entrar en el Centro de Vuelo Espacial Goddard?

-Me fui de intercambio al MIT de Boston, en Massachusetts. Recibí una beca de La Caixa estando allí. Es una beca que te paga dos años de máster, doctorado o alguna estancia de investigación en Estados Unidos. En el MIT realicé un proyecto, y al acabarlo pensé en quedarme allí, pero entonces contacté con una científica de la NASA que me dijo que como tenía una beca podía ir a trabajar con ellos. Gracias a la beca de CaixaBank que recibí, pude entrar.

¿Qué significa trabajar en la NASA?

-Muchas cosas. Desde que empecé a estudiar Ingeniería siempre me había costado encontrar mi pasión, saber lo que me gustaba de verdad. La carrera de Ingeniería es muy amplia y puedes hacer un montón de cosas distintas. Intenté probar de todo, pero nunca di con algo que me apasionara a pesar de que lo buscaba con desesperación. Estando en Boston tuve la idea de que podría trabajar en la NASA. Descubrí que el tema del espacio me gustaba mucho. Es algo que tenía latente pero nunca me había parado a pensar. Trabajar aquí supone desarrollar todo lo que he aprendido en la carrera a un nivel en el que tienes que llegar al límite de las cosas. Tienes que llevar todos tus conocimientos al límite, lo que también supone un impacto, aunque yo creo que es una motivación muy importante para trabajar. De alguna forma tienes que sentir que sirves a la sociedad, que ellos te lo reconocen y eso también es lo que hacemos aquí. Al final, todos estos componentes dan mucho valor a la NASA y es lo que significa para mí el estar aquí.

Ha mencionado que la labor que ejerce se basa en construir satélites. ¿Podría especificar un poco más?

-Lo que yo hago es el diseño 3D del satélite. Tengo una herramienta en mi ordenador que me permite hacer el modelado 3D con todos los componentes. Al final, es como un puzzle gigante, hay que juntar las piezas. Además, para poder realizar esa labor tienes que hablar con todo el mundo. Por otro lado, también hago las labores de gestión de proyecto, es decir, gestionar los presupuestos, los calendarios, etc.

Y ahora mismo, están construyendo un satélite para el análisis de la radiación del Sol.

-Trabajo para dos divisiones, pero sobre todo para la división de Física. Es una división que se dedica a estudiar el Sol, es decir, cómo se comporta el Sol y cómo nos puede afectar a nosotros en la Tierra. Ahora mismo, estoy trabajando con el satélite que has mencionado. Tengo varios proyectos, pero ese es el principal. Es un satélite que está orientado a estudiar la radiación solar, o como nosotros lo llamamos: viento solar. Esto es, el Sol está constantemente emitiendo una cosa que se llama viento solar, que son partículas cargadas. Hay que predecir muy bien esa radiación, saber cómo se transfiere por el espacio interplanetario hasta llegar a la Tierra.

¿Cómo ha afectado la pandemia a la NASA?

-Hay una gran parte del personal que hemos pasado a trabajar desde casa, y otra parte que no. Al final, hay gente que tiene que estar ahí todo el tiempo, como los que controlan los satélites o la Estación Espacial Internacional. No te puedes salir de los controles, no puedes dejar que vaya solo. En mi caso, estamos en fase de diseño con el satélite de la radiación solar; no tenemos nada físico, estamos haciendo dibujos. Pero ahora ya vamos a empezar a fabricar piezas y a probar equipos. Es cuando vamos a ir a los laboratorios y talleres, porque hasta ahora ha sido casi todo desde casa. La verdad que a nivel general, la NASA ha seguido trabajando muy bien.

¿Algún día pensó que acabaría trabajando en la NASA?

-La verdad es que no, porque yo me esforzaba mucho en descubrir mi pasión probando cosas diferentes. Pero la verdad que ni se me había ocurrido. En el momento en el que se me ocurrió, lo intenté, pero no llegué a pensar en ningún momento que este sería mi futuro.

Ahora, además, ha sido seleccionado como Nova Talent.

-Es una oportunidad. La verdad es que me da mucha pena porque estoy en Estados Unidos, un poco aislado, pero es una oportunidad para poder conectar con gente. En España se organizan muchos eventos de networking como en Madrid y Barcelona. Es una manera genial de estar en contacto con gente joven que tiene ideas. Y haber salido en esta lista me parece también un reconocimiento de uno mismo y del trabajo que uno ha hecho.

¿Cuáles son sus planes de futuro?

-Difícil de decir. Nunca pensé que podría estar aquí y eso es porque uno empieza a plantear su futuro demasiado tarde. Es imposible pensar en tu camino sin darte cuenta de las oportunidades que hay alrededor y ni siquiera sabes que existen. Pero es verdad que después de haber estado cierto tiempo trabajando con satélites y aparatos no tripulados, me gustaría pasar a trabajar en algo relacionado con la exploración humana del espacio, es decir, con astronautas. Ya sea creando el diseño de la cápsula que vamos a usar para volver a la Luna, el cohete, o algo más relacionado con lo que es llevar a un hombre al espacio, no a un robot. Aun así, tienen que ir encajando las piezas.