Osakidetza ha detectado un brote intrahospitalario en el Hospital de Santa Marina con una veintena de casos positivos. Tras la detección de un primer caso positivo hace 10 días se han tomado varias medidas preventivas con el fin de frenar la expansión del virus. Entre otras, los responsables del centro ha puesto en cuarentena a los contactos estrechos de las personas contagiadas.

Además, se han realizado tres cribados a pacientes, dos cribados entre los profesionales del hospital y un cribado a acompañantes de la quinta planta, que se ha clausurado como precaución. Por otro lado, se ha procedido a la limpieza y a la desinfección ambiental de la 5ª planta. Según el departamento de Salud del Gobierno vasco, el cribado y seguimiento de contactos ha posibilitado identificar a las personas que han dado positivo. Se seguirán tomando medidas que ayuden a detener la propagación del virus. Además, se ha solicitado tipado para saber de qué variante de covid se trata.