- La Diputación de Gipuzkoa celebró ayer el sobreseimiento provisional y el archivo de la denuncia del colectivo ecologista Eguzki y la asociación Landarlan contra la construcción de las pistas de Aralar, y recalcó que el proyecto “se llevó a cabo cumpliendo la legalidad” y con el objetivo de “mejorar las condiciones de los pastores de la zona, la accesibilidad de la zona y buscando el bien común”.

La portavoz foral, Eider Mendoza, consideró que la decisión del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 3 de Tolosa, dada a conocer el lunes, “deja claro” que se actuó de forma correcta en la proyección de las pistas de Intxansao a Goroskintxu.

El fallo considera que los imputados actuaron conforme a la legalidad vigente y que no hubo un impacto medioambiental relevante, tal y como muestran los diversos informes realizados tanto por la institución foral como por las unidades de investigación criminal de Gipuzkoa y Bizkaia.

Asimismo, Mendoza mostró su solidaridad con la directora foral de Montes y Medio Natural, Arantxa Ariztimuño, el exdirector foral de Obras Hidraúlicas, Félix Asensio, recientemente fallecido, y el exalcalde de Ordizia Josemi Santamaria, quienes, según denunció, sufrieron una “persecución con fines políticos”.

Pese a que el ministerio fiscal ha decidido dar carpetazo al asunto y no recurrir el fallo, el grupo ecologista Eguzki y la asociación Landarlan, impulsores de la denuncia interpuesta en los juzgados de Tolosa, emitieron ayer un comunicado en el que recordaron que el archivo judicial “no es definitivo” y que lo han recurrido “sin que hasta la fecha se haya resuelto dicho recurso”. De igual manera, destacaron que la segunda pista de Enirio a Doniturrieta Igaratza “sigue su trayectoria judicial”.

Ambos grupos consideran que “se ha producido un delito ecológico” porque la Diputación, responsable de hacer cumplir la normativa del parque natural de Aralar, “no ha respetado la misma, promoviendo la construcción de pistas cuando no se pueden construir caminos para proteger el frágil entorno”.

Asimismo, entienden que la Mancomunidad de Enirio Aralar aprobó la construcción de la pista en una zona de monte protector “en la que resulta aconsejable la presencia de masas arboladas”. “Como consecuencia, la normativa establece, entre otras directrices, la limitación del pastoreo, algo que no se hizo durante la pasada legislatura, incumpliendo la ordenanza aprobada por la propia mancomunidad”.