- Ahora que se cumple un año del primer fallecimiento causado por el covid-19 en el Estado, y pese a todas las restricciones que continúan limitando nuestra vida cotidiana tanto tiempo después, la pandemia ha pasado a otra dimensión desde que la vacunación ha entrado en escena. Basta con echar un vistazo a lo que está sucediendo en las residencias de ancianos, el sector de la población más vulnerable frente al virus. Desde que el pasado 27 de diciembre arrancara la vacunación -en Gipuzkoa, en el centro Betharram de Hondarribia-, los brotes dentro de estos recursos asistenciales se han reducido a la mitad. Buena prueba de que el antídoto, además de ser seguro, funciona.

Por ello, una vez concluida la vacunación en estos centros (en Gipuzkoa finalizó el viernes y en Araba y Bizkaia se espera para los próximos días), el Gobierno Vasco prepara los siguientes pasos en la inmunización de colectivos vulnerables y de trabajadores esenciales. El objetivo es que para el mes de junio, la población mayor de 70 años ya esté vacunada, aunque eso dependerá de la disponibilidad de las vacunas. No obstante, se confía en que el ritmo de vacunación vaya aumentando en las próximas semanas y pueda administrarse el antídoto de forma paralela a distintos colectivos.

Tras la vacunación de dos de los colectivos más vulnerables en esta pandemia (los usuarios de las residencias y del personal sanitario y sociosanitario que trabaja en estos centros, y los sanitarios que trabajan en primera línea) la Comisión de Salud Pública del Estado español, en la que Euskadi participa junto a otras comunidades autónomas, ha decidido que los próximos en vacunarse sean el personal sanitario y sociosanitario no vacunado con anterioridad y trabajadores de colectivos con una función esencial para la sociedad, entre los que se priorizará a aquellos con un mayor riesgo de exposición al contagio.

A este respecto, esta semana ha dado comienzo la inoculación de los profesionales de la Atención Primaria, priorizando a aquellos profesionales que desempeñan actividades presenciales, entre los que se incluye al personal de subcontratas de limpieza. Y la próxima semana, concretamente el miércoles, arrancará la vacunación de la Ertzain-tza. Se llevará a cabo en las dependencias policiales y la efectuará el propio personal sanitario cualificado del Departamento de Seguridad, que recibirá formación específica de Osakidetza.

Tras ellos, llegará el turno de los docentes de Primaria y Secundaria.

Entre las prioridades de la Administración se encuentran también los profesionales de centros de día sociosanitarios y los servicios de asistencia domiciliaria de los ayuntamientos, así como las personas consideradas como grandes dependientes (requieren de intensas medidas de apoyo) que no estén institucionalizadas.

Posteriormente llegará el turno de los trabajadores de consultas médicas particulares, de consultas o gabinetes de fisioterapia o rehabilitación y de consultas de podología, así como a personal de viviendas comunitarias de personas mayores, incluidas las congregaciones religiosas de personas mayores y con menos de quince miembros. También el personal de centros residenciales de menores con sentencia judicial, centros penitenciarios de adultos.

Finalmente, se vacunará a farmacéuticos y auxiliares de farmacia, cajeras de supermercado, transportistas de transporte público, abogados del turno de oficio, funerarios y otros grupos, como personas mayores de 80 años.

De esta forma, el Gobierno Vasco confía en que para verano la tan ansiada nueva normalidad sea una realidad.

89.883

Es el número total de vacunas que se han administrado en Euskadi desde finales de diciembre según los datos que maneja el Ministerio de Sanidad. Esto supone el 72,2% de las inyecciones recibidas, y es que a la CAV han llegado, por el momento, 124.460 dosis. La vacuna más administrada ha sido la estadounidense Pfizer, de la que se han recibido 107.460 unidades. Se trata de una vacuna con una logística compleja, ya que requiere de una temperatura de conservación de -70ºC. Euskadi cuenta también con 9.100 unidades de la vacuna inglesa AstraZeneca, que aunque puede conservarse entre 2ºC y 8ºC, no está recomendada para mayores de 65 años. Finalmente, se han recibido 7.900 dosis de Moderna, que se conserva a una temperatura de -20ºC.

36.125

Es el número de vascos que han sido inmunizados frente al covid-19 al haber recibido ya las dos dosis de la vacuna. En su mayor parte, se trata de usuarios de residencias de ancianos, así como personal sanitario y sociosanitario que trabaja en estos centros, y personal de primera línea en el ámbito sanitario.

La pasada semana arrancó la vacunación entre los profesionales de la Atención Primaria y el miércoles empezará en la Ertzaintza