- El lehendakari, Iñigo Urkullu, reconoció ayer la voluntad de “colaboración y el esfuerzo” realizado por la Universidad en el marco del Grupo de trabajo del Sistema Universitario Vasco durante la pandemia y destacó que el objetivo es “seguir desarrollando la misión de la Universidad en esta situación excepcional con la prioridad de garantizar la seguridad de las personas y preservar la calidad del proyecto de enseñanza-aprendizaje”. Urkullu, acompañado del consejero de Educación, Jokin Bildarratz, asistió a la inauguración del nuevo edificio de la Facultad de Humanidades y Ciencias de la Educación-Huhezi de Mondragon Unibertsitatea (MU), donde presidió la apertura al curso 2020-2021, que contará con 1.500 nuevos estudiantes de grado, un 5,5% más que el cuso pasado.

La sesión se inició con la lectura de la memoria correspondiente al pasado curso, a la que siguió la lección magistral a cargo de la directora de Investigación y Transferencia de Huhezi, Nagore Ipiña, y el discurso del rector de MU, Vicente Atxa. En su intervención, el lehendakari abogó por seguir desarrollando la misión de la Universidad en esta “situación excepcional” con la prioridad de “garantizar la seguridad de las personas y preservar la calidad del proyecto de enseñanza-aprendizaje”. En este caso, se refirió al Plan Mendeberri 2025 de Mondragon Unibertsitatea, enfocado al aprendizaje orientado al desarrollo de las competencias y a los resultados del aprendizaje; a la educación universitaria enfocada al aprendizaje a lo largo de la vida; y “a la concepción de una educación superior con vocación de servicio al país, a su sociedad”. “Una visión que transmite la necesidad de la mejora continua en nuestro proyecto educativo”, remarcó.

Urkullu destacó el modelo de cooperación por el que se rige Mondragon Unibertsitatea, un modelo que, en la práctica, busca “aportar mejores capacidades y oportunidades a la juventud” y abogó por los procesos de transformación e innovación en los centros educativos. Asimismo, quiso reconocer “la voluntad de colaboración y el esfuerzo realizado” por la Mondragon Unibertsitatea, en el marco del Grupo de trabajo del Sistema Universitario Vasco, durante esta pandemia; así como “la voluntad y el esfuerzo en los agentes, empresas y entidades que trabajan en el desarrollo de la formación en clave de colaboración”.

“Cooperar significa, en la práctica, aportar mejores capacidades y oportunidades a la juventud. Cooperar significa asentar la vocación social, la formación integral, la innovación. Significa transformar en positivo, contribuir a construir un futuro más justo y mejor para toda la sociedad”, expresó.

Por su parte, el rector de Mondragon Unibertsitatea, Vicente Atxa, repasó cómo la universidad en “un tiempo récord” tuvo que adaptarse a las consecuencias del COVID-19, con más de 5.500 estudiantes pasando de una formación presencial a hacerlo on line exclusivamente, “gracias a que las bases de la formación digital estaban ya sentadas”. También hizo alusión a los protocolos definidos para este nuevo curso, con todos los escenarios posibles analizados por la universidad. “Estamos preparados para desarrollar la actividad de forma presencial y segura, por supuesto acompañada con medios digitales que nos permitan desarrollar nuestra actividad online parcial o totalmente si la situación lo requiere”, detalló. Atxa destacó que el futuro de MU está marcado por un nuevo Plan Estratégico “muy ambicioso”, y que tiene como reto “tener más impacto en Euskadi, en su transformación social y empresarial, y convertirnos en un referente internacional como universidad innovadora”.