- El porcentaje de vascos que han generado anticuerpos por el coronavirus se mantiene y se sitúa en un 3,6%, según la última oleada del estudio de seroprevalencia elaborado por el Ministerio de Sanidad y el Instituto de Salud Carlos III (ISCIII).

La tercera ronda del macroestudio que arrancó el pasado 27 de abril para tratar de medir la inmunidad de la población, en el caso de Euskadi no presenta cambios significativos con respecto a la anterior al no variar prácticamente los resultados, ya que arrojado que un 3,6% de las 3.114 personas participantes tienen anticuerpos, una décima por debajo del porcentaje registrado en la segunda tanda de este cribado.

Este dato se sitúa por debajo del global en el Estado, que asciende a un 5,2%. Por territorios, el mayor grado de inmunidad se ha detectado en Álava, con un 6,4%, dos décimas por encima que en la segunda oleada, seguido de Bizkaia, con un 3,6% (3,7% en la anterior), y del 2,5% en Gipuzkoa (2,6% en la anterior).

El estudio también analiza el uso de mascarillas durante la desescalada, obligatorias si no se puede garantizar la distancia de seguridad, y recoge que mientras que en el Estado reconocen no usarla nunca el 7% de las personas testadas, en los territorios vascos este porcentaje sube hasta el 39,6% en Gipuzkoa, y ronda el 26% en Bizkaia y en Álava.

En la presentación de los datos, la directora del Centro Nacional de Epidemiología, Marina Pollán, informó que entre los profesionales sanitarios, la tasa de prevalencia de anticuerpos es del 10% entre quienes trabajan en centros sanitarios, y del 7,7% entre los que trabajan en residencias de ancianos.

Otro de los datos destacados de este estudio, que ha hecho un seguimiento en tres oleadas, a 68.296 personas de todas las edades, comunidades y provincias, es que de entre los resultados de la primera oleada a la tercera, el 14% se ha seronegativizado, es decir, que tuvieron anticuerpos y ya no los tienen. La “pérdida” de los anticuerpos fue más frecuente en personas que no habían tenido ningún síntoma (11% entre las rondas 1 y 2, con información más precisa) y mucho menos frecuente en los participantes con una PCR positiva (0,5%) y en aquellos que describieron pérdida súbita del olfato o del gusto (2,6%).

Este hecho demuestra, según la directora del Instituto de Salud Carlos III, Raquel Yotti, que se sigue “sin conocer” la enfermedad. Precisamente por este motivo, tanto ella como Pollán lanzaron ayer un mensaje de “prudencia” a las personas que han padecido el COVID-19 porque no está confirmado que tengan una inmunidad completa al virus. “Lo que vemos en este dato es la incertidumbre que están evidenciado los datos”, en palabras de Yotti, a lo que Pollán añadió que un test que no detecte anticuerpos no significa que no estén presentes.

Yotti también destacó el carácter singular de este estudio que, dijo, “es único a nivel mundial y así ha sido reconocido desde el ámbito científico y desde organismos internacionales de salud pública”, y subrayó que en un artículo publicado ayer en la revista médica británica The Lancet se han presentado los datos consolidados de la primera oleada y se realiza un análisis pormenorizando, poniendo de manifiesto la “calidad y rigor metodológico y la validez de los resultados”.