Denuncian que la izquierda abertzale trató de ocultar una agresión sexual en Zarautz

Según un escrito remitido a Urola Kostako Hitza y hecho público el martes, aunque los hechos sucedieron el pasado diciembre, el abuso viene de lejos, concretamente de meses atrás, cuando el agresor, un hombre de alrededor de 40 años, miembro "referente" de la izquierda abertzale en la localidad, mantenía actitudes de acoso hacia una joven de 19 años, camarera del bar Arrano, del que era cliente habitual.

Los denunciantes afirman que una noche de diciembre, en la que los únicos presentes en el local eran el agresor, tres amigos de éste y la víctima, que era la encargada de cerrar el bar, el acusado entró en la barra y, tras arrinconar a la joven, le realizó tocamientos en su cintura y sus nalgas, lo que provocó la actuación de uno de los tres hombres, que detuvo la agresión. Asimismo, una vez que la mujer salió del bar, continuó con su actitud "abusiva", volviendo a agarrarla y acosarla verbalmente.

Dos meses después de estos hechos, la víctima expuso lo sucedido ante la Asamblea del Arrano, que decidió que la denuncia fuera gestionada por la estructura nacional de Sortu. Se nombró un intermediario para tratar de poner luz sobre lo ocurrido, escuchando la versión de ambas partes.

Sin embargo, con la irrupción de la crisis sanitaria del corovanirus, el decreto del estado de alarma y el consiguiente confinamiento, el proceso quedó paralizado el pasado 18 de marzo, cuando la víctima señaló que prefería retomar la cuestión una vez superada la cuarentena, creyendo que su duración iba a ser menor.

Así las cosas, según explican los denunciantes, el intermediario nombrado por Sortu volvió a ponerse en contacto con ella este martes y le responsabilizó de paralizar el protocolo.

Por ello, los firmantes de esta carta entienden que tanto la estructura nacional de Sortu como la Asamblea del Arrano han antepuesto "sus intereses partidistas por delante del bienestar de la víctima", a quien no han ofrecido una "respuesta responsable".

Los denunciantes han convocado para hoy una concentración de repulsa que tendrá lugar a las 20.00 horas en la plaza del Ayuntamiento, un llamamiento al que se adhieren desde el Consistorio.

Tras conocerse estos hechos, el Ayuntamiento de Zarautz aprobó ayer por unanimidad una declaración institucional en la que señaló su más firme rechazo a lo ocurrido y mostró su apoyo a la víctima, a quien ofrece los recursos jurídicos y económicos que necesite para afrontar este lamentable hecho. El texto, que firman PNV, PSE, EH Bildu y Podemos, recoge que la violencia machista es un problema "estructural" de la sociedad y que, por ello, el Ayuntamiento se compromete a garantizar la igualdad de derechos de todas las personas, a fin de "fomentar la convivencia" y "prevenir cualquier tipo de violencia contra la mujer".

Finalmente, tanto Sortu como Arrano de Zarautz hicieron público a última hora de ayer un comunicado en el que remarcaron que desde el primer momento se ha reconocido la gravedad de este hecho e insistieron en que el protocolo interno iniciado "sigue en marcha", por lo que continuarán dando "los pasos previstos".

En esta línea, expusieron que se ha decidido "expulsar" al supuesto agresor de los espacios de la izquierda abertzale, incluido el bar Arrano, una medida que dicen, continúa vigente. Justificaron que, si hasta ahora no han denunciado públicamente estos hechos es porque la víctima así lo ha querido, y afirmaron que, una vez conocida la denuncia, apoyan la decisión de hacerla pública e invitan a la ciudadanía a sumarse a la movilización de hoy. "La Comisión del Arrano y Sortu denuncian cualquier agresión machista, tanto en el Arrano como en cualquier otro lugar, independientemente de que el autor de la agresión sea o no miembro de la izquierda aber-tzale", sentenciaron.

Sortu y Arrano Taberna dicen que el protocolo interno iniciado sigue en marcha y que no hicieron pública la denuncia porque la víctima no quería