El Consejo de Gobierno de la Diputación Foral de Gipuzkoa ha dado este martes luz verde a un nuevo Decreto Foral-Norma con más medidas tributarias coyunturales destinadas a la reactivación económica tras la emergencia sanitaria del COVID-19. La decisión se enmarca en el Plan de Recuperación Económica y Social de la Diputación, que articula el esfuerzo foral por hacer frente a las consecuencias económicas y sociales de la pandemia, y va dirigida sobre todo a personas autónomas, microempresas y pequeñas empresas.

La portavoz foral, Eider Mendoza, ha recordado que Gipuzkoa sigue avanzando en la desescalada y, con ello, la economía se va reactivando poco a poco: "Se trata de medidas urgentes que permitan incentivar esa reactivación económica, y que minimicen los daños de la crisis en el tejido productivo. Son medidas transitorias, diseñadas ad hoc para responder a la situación generada por esta pandemia".

Según ha recordado Mendoza, la institución foral está actuando "en todos los frentes" desde el inicio de la crisis sanitaria, social y económica generada por el COVID-19. En el ámbito fiscal, la Diputación ha aprobado dos paquetes de medidas destinadas a proteger a las personas contribuyentes más vulnerables, a los que ahora se suma este Decreto Foral-Norma. "Políticas sociales y promoción económica son las grandes prioridades de la Diputación Foral de Gipuzkoa a la hora de hacer frente a esta pandemia, y están siendo también nuestras prioridades en el ámbito fiscal", ha señalado.

La normativa que hoy ha recibido el plácet del Gobierno foral persigue cuatro objetivos principales: por una parte, paliar la falta de liquidez de las y los contribuyentes que desarrollan actividades económicas (personas autónomas, pymes, empresas€). Asimismo, incluye medidas destinadas a fomentar el emprendimiento, así como la generación y consolidación de empleo estable y de calidad. Por último, el cuarto objetivo es el de apoyar la transformación digital del pequeño comercio hacia el comercio electrónico que, en la crisis generada por el COVID-19.

Las principales medidas afectan al Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF) y el Impuesto sobre Sociedades.

Carry-back para personas autónomas

Carry-backEntre las medidas adoptadas, la portavoz foral ha destacado la activación de un mecanismo fiscal conocido como carry-back en el IRPF, que consiste en compensar con beneficios presentes pérdidas futuras. El objetivo de esta medida es paliar la falta de liquidez de los y las contribuyentes que desarrollan actividades económicas, en este caso, personas autónomas, y se trata de una nueva figura tributaria en Gipuzkoa.

En base a esta medida, en la actual campaña de la Renta, la de 2019, aquellas personas que demuestren que en el primer semestre de 2020 su cifra de negocios ha sido significativamente inferior a la de 2019, podrán reducir de su base imponible el rendimiento neto negativo estimado para 2020. Dicha cuantía no podrá superar el rendimiento positivo de 2019, y en la próxima campaña deberán de computar la deducción como mayor rendimiento de actividad económica; dicho de otro modo, podrán compensar pérdidas de 2020 con beneficios de 2019.

En lo que respecta al procedimiento, los y las autónomas deberán presentar un nuevo modelo, diferenciado de la declaración de la Renta y que se preparará ad hoc para que este colectivo pueda acogerse a esta medida. Según ha detallado la portavoz foral, consistirá en un procedimiento muy simple, "apenas se requerirá un dato". Este modelo tendrá que presentarse antes del final de la campaña de la Renta, actualmente en marcha y que concluirá el próximo 29 de julio.

Carry-back para empresas

Carry-backEn el caso de las empresas, la normativa del Impuesto sobre Sociedades ya prevé un sistema similar para compensar bases imponibles negativas, pero que ahora también será potenciado, para responder mejor a la situación de excepción generada por la pandemia global del COVID-19. El objetivo, en este caso, será el mismo que en el caso de las personas autónomas, solo que aplicado a las empresas. Así, en la próxima campaña de Sociedades, aquellas empresas que demuestren que en el primer semestre de 2020 su cifra de negocios ha sido significativamente inferior a la de 2019, podrán reducir su base imponible de 2019 un 50%, y un 75% si son microempresas o pequeñas empresas.

Deducción por inversión en pymes

Otras de las medidas que ha destacado Mendoza es la de la introducción de una nueva deducción en el Impuesto sobre Sociedades, que busca beneficiar a microempresas y pymes y, de este modo, impulsar el segundo objetivo: fomentar el emprendimiento. Así, este mecanismo bonifica las inversiones en participaciones en microempresas, pequeñas empresas y medianas, llevadas a cabo en 2020. La deducción varía su intensidad en función de la tipología de la empresa: el incentivo será del 10% y de hasta 100.000 euros por inversiones en pymes; del 15% y de hasta 150.000 euros por inversiones en start-ups; y del 20% y de hasta 200.000 euros por inversiones en pymes innovadoras.

Deducción por creación de empleo

Entre las medidas destinadas a materializar el tercer objetivo de este Decreto Foral-Norma, el de la creación y la consolidación de empleo estable, destaca la potenciación de la deducción por creación de empleo existente en el Impuesto sobre Sociedades. Esta medida beneficia a todas aquellas que creen empleo y, de este modo, puedan acogerse a dicho beneficio fiscal. La normativa aprobada hoy por el Consejo de Gobierno de la Diputación eleva el límite de esta deducción de los 4.900 euros actuales hasta los 7.500 euros, por cada trabajador.

Constitución de sociedades por personas trabajadoras

También en el mismo capítulo de medidas destinadas a fomentar la creación y consolidación de empleo estable, se encuentra la potenciación de las deducciones existentes en el IRPF para personas trabajadoras que constituyan una empresa para la que van a trabajar. Esta medida se encuadra en la estrategia foral para impulsar la participación de las personas trabajadoras en la empresa. En concreto, se introducen las siguientes modificaciones en el incentivo por constitución de sociedades: por un lado, los porcentajes de deducción se incrementan un 5%, y por el otro, los límites anuales suben de 1.200 euros a 6.000 euros en el caso de los hombres, y de 1.800 euros a 8.000 euros en el caso de las mujeres.

Deducción para la transformación digital del pequeño comercio

En lo que respecta al cuarto objetivo, el de apoyar la transformación digital del pequeño comercio hacia el comercio electrónico, la Hacienda foral guipuzcoana apuesta por introducir una nueva deducción en el IRPF y en el Impuesto sobre Sociedades, destinada a personas autónomas y microempresas y pequeñas empresas respectivamente. En los dos tributos, se introduce una deducción del 30% de los gastos efectuados en 2020 para la implantación del comercio electrónico. "La crisis del COVID-19 y las medidas adoptadas para combatirlo hacen indispensable que gran parte del comercio dé el salto de incorporarse al mundo digital, y este incentivo va precisamente en esa dirección", ha explicado la portavoz foral.

Exención del seguro específico para el personal sanitario

Por último, Mendoza ha hecho querido destacar también otra medida diseñada también específicamente en el contexto de la pandemia del COVID-19. Dicha modificación está dirigida al personal sanitario, y afecta al Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones. "En el contexto de la crisis del COVID-19, las entidades aseguradoras (a través de UNESPA) han creado un seguro colectivo gratuito para todo el personal sanitario, que cubre las prestaciones de enfermedad y fallecimiento como consecuencia de esta enfermedad. La medida en cuestión consiste en dejar exenta esta prestación para el personal sanitario en el Impuesto sobre Sucesiones y Donaciones ya que, a efectos fiscales, se considera una donación", ha explicado Mendoza.