La seguridad en los pasos de Biriatu, Behobia y el Puente de Santiago se han reforzado con motivo de la celebración en Madrid de la cumbre de la OTAN y los controles especiales se prolongarán hasta las 00.00 horas del próximo 3 de julio, según informó ayer la delegación del Gobierno español en la CAV. El Ministerio del Interior ha diseñado un importante y complejo dispositivo para garantizar la seguridad de los jefes de Estado y de Gobierno que empiezan a desembarcar en la capital del Estado. Itxaso, que mantuvo una reunión en Bilbao con los representantes de los distintos consulados extranjeros en Euskadi para fortalecer relaciones, indicó que, "como es natural", en un evento de las características del encuentro de la Alianza Atlántica, "el Estado se ve obligado a incrementar las medidas de seguridad y eso incluye el control de las fronteras".

Por ello, el delegado Denis Itxaso explicó que, en la entrada desde el Estado francés al Estado español, en el paso de Biriatu, "se ha producido ya un reforzamiento significativo del control de la frontera que, en principio, está previsto que permanezca hasta las 00.00 horas del día 3". En todo caso, matizó que, "si se diera el caso de poder levantar esos controles antes", serán los mandos policiales quienes lo evalúen, pero, en principio, el dispositivo previsto incluye que el refuerzo de los controles incluya todo el día 2.

Preguntado por si prevén que pueda haber problemas con los flujos migratorios en Irun, tras lo vivido en Melilla, dijo que "hay que distinguir diferentes planos". "En lo que son flujos fronterizos en el interior del continente, de la UE, España sigue abogando por unas migraciones seguras, ordenadas y sigue respetando el acuerdo de Schengen", destacó Itxaso. Según aseveró, "otra cosa es que puntualmente, dadas las circunstancias y por las singularidades que tiene una cumbre de la OTAN en Madrid, al igual que sucedió cuando se celebró el G-7 en Biarritz, se refuercen los controles la frontera, en este caso, sentido entrada al país, precisamente para garantizar la seguridad de ese evento".

Todo está a punto para alzar el telón de esta cumbre entre fuertes medidas de seguridad. 98 perros policía, 60 caballos y parte de los más de 10.000 agentes que conforman el dispositivo se encargan de poner a punto la "zona cero" del macroevento, el recinto de Ifema, que se encuentra en "fase crítica" a horas de la llegada de las delegaciones internacionales. El trabajo por subsuelo, tierra y aire de varios meses se redobló en los últimos días con los preparativos, y ayer mismo llegaron las últimas mercancías -cáterin, decorado, acreditaciones y otras- todas ellas "peinadas" de forma exhaustiva por la Policía, con especial desempeño de su Unidad Canina.

Durante los días en los que transcurra la cumbre, serán capaces de detectar cualquier tipo de explosivo o arma -ya que también descubren la pólvora- en el entorno de Ifema y otros puntos críticos de la capital del Estado. Algunos de esos enclaves son los hoteles en los que se alojarán las diferentes delegaciones asistentes, muchos de ellos situados en el eje del paseo de la Castellana. Todos han sido acordonados y perimetrados en un radio de unos 300 metros por la Policía Municipal de Madrid, evitando que coches aparcados dificulten el trasiego de los participantes en la cita mundial.

despliegue policial

Agentes de la Policía Nacional asegurarán las diversas rutas que seguirán camino al recinto de Ifema, así como su desplazamiento a otros actos de la agenda de la cumbre, como la cena de mañana en el museo del Prado, a la que asistirán gran parte de los líderes de los Estados miembro de la OTAN. Lo mismo hará la Guardia Civil con 285 agentes fuera del área metropolitana de la capital, donde en puntos como el Corredor del Henares se alojarán algunas delegaciones. Estos últimos cuatro meses policías de la Unidad de Subsuelo han trabajado para peinar cada rincón subterráneo en busca de garantizar que no existen amenazas bajo tierra. Buscan en la red de alcantarillado y los canales de aguas cualquier tipo de objeto sospechoso o sensible, sobre todo en puntos situados bajo el entorno de Ifema, los recorridos previstos de las delegaciones internacionales y sus hoteles.

la logística de la cita

ocho aviones y 80 vehículos al servicio de joe biden.

La base aérea de Torrejón de Ardoz se enfrenta a un desafío logístico sin precedentes con motivo de la celebración de la cumbre de la OTAN. Tendrá que recibir a medio centenar de aviones oficiales que llegan hoy al Estado español concentrados en tan solo cinco horas. En total, se espera que participen cerca de 40 delegaciones internacionales. De ellas, una treintena aterrizarán en la base del Ejército del Aire y el resto en el aeropuerto de Barajas. Casi todas las delegaciones constan de un único avión al que le espera una delegación oficial de coches. Pero hay países que desembarcarán en Madrid con más de un avión. Es el caso de Italia, Francia, Alemania o Turquía, con tres aparatos. El mayor despliegue es el de Estados Unidos. La delegación que lleva a su presidente, Joe Biden, y a todo su equipo consta de ocho aviones, además de una caravana que contendrá hasta 80 vehículos.

ucrania y asia ponen nombre propio a la cumbre.

A los tradicionales líderes de la Alianza se unen esta vez los candidatos Suecia y Finlandia más los mandatarios de Corea del Sur, Japón, Australia y Nueva Zelanda. La situación política mundial es de incertidumbre, sobre todo por la invasión de Ucrania, pero también por el desafío geoestratégico que supone China para Occidente y las pruebas nucleares de Corea del Norte.