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La actividad de Donostia Kultura genera 62 millones en la ciudad

Más de 2,8 millones de personas acuden a centros culturales, fiestas, conciertos o actividades

La actividad de Donostia Kultura genera 62 millones en la ciudad

donostia - Donostia Kultura, que maneja un presupuesto anual de 25,25 millones de euros, genera en la ciudad un impacto económico de casi 63 millones de euros y provoca ingresos por valor de 22,5 millones para las instituciones (en concepto de impuestos, entre otros). Además del económico, el impacto social también es importante, aunque es más difícil de cuantificar. Donostia Kultura presentó ayer los resultados del estudio encargado para analizar ambos. El objetivo era justificar el impacto que tienen los 19 millones de euros que Donostia invierte en el organismo cultural y analizar si se puede avanzar en la autofinanciación, que abarca el 25% del presupuesto anual.

Las casas de cultura y bibliotecas, actividades artísticas, fiestas y otro tipo de eventos organizados por Donostia Kultura atrajeron el año pasado a 2,83 millones de personas. Algo más de la mitad son usuarios que han acudido a las casas de cultura y bibliotecas y más de 800.000 fueron las personas que acudieron a las fiestas organizadas durante todo el año. Además, unas 275.000 asistieron a conciertos o espectáculos y 240.000 más visitaron los museos y exposiciones organizadas por Donostia Kultura. En la actualidad cuenta con casi 86.000 socios, el doble que en 2006.

De esos casi 63 millones que genera toda esta actividad, el 58% (36,3 millones) corresponden solo al gasto que se hace en la ciudad en el marco de la Aste Nagusia. Otros 13,6 millones se gastan alrededor de las casas de cultura y 6,2 millones más con motivo de los conciertos o actividades musicales programadas a lo largo del año. Además, otros 6,2 millones se gastan en torno a la programación relacionada con el cine, las artes escénicas o los museos dependientes de Donostia Kultura.

El estudio analiza también el entramado que conforma el organismo cultural donostiarra, que emplea a 213 trabajadores e impulsa otros 251 puestos indirectos. Todos ellos se reparten en los diez centros culturales de la ciudad que ofrecen un servicio más próximo a los ciudadanos, las bibliotecas, los teatros Victoria Eugenia y Principal y el Museo San Telmo, además de en un departamento de fiestas y en equipos centrados en la programación de artes escénicas, música y cine.

“Donostia Kultura acompaña a los donostiarras en todo su ciclo vital: ofrece bebetecas para acercarse a la lectura, espacio de estudio para jóvenes, actividades lúdicas y de ocio, cursos de formación para adultos y actividades específicas para mayores de 55 años”, destacó ayer el autor del estudio Iñigo Artetxe, de Ikertalde.

impacto social Respecto al impacto social de la actividad de Donostia Kultura, Artetxe destacó que el estudio reveló que el 80% de los donostiarras consideran que cerrar un centro cultural afectaría muy negativamente a su barrio; un 54% afirma que le afectaría mucho también personalmente. Estos datos indican, según Artetxe, que la percepción social de estos centros es mayor, ya que se considera que sin ellos pierde más el barrio que cada uno de los usuarios. “Una sociedad más culta e integrada” es otra de las consecuencias de Donostia Kultura, según el estudio.

“Estos datos demuestran que la cultura también es un motor económico e invertir en ella es inteligente”, afirmó ayer el alcalde de Donostia, Juan Karlos Izagirre. La responsable de Cultura del Ayuntamiento, Nerea Txapartegi, destacó también que el organismo colabora con alrededor de 500 asociaciones y agentes.