Perros guía que salvan obstáculos

La Diputación Foral de Gipuzkoa ha aprobado un Decreto Foral por el que se crea un Registro de Perros de Asistencia para la atención a personas con discapacidad, y se establece el procedimiento para su acreditación. De este modo, no se podrá denegar el acceso a lugares, establecimientos o transporte público dentro del territorio a ninguna persona con discapacidad cuyo perro esté inscrito.

Este Decreto se dio a conocer ayer, en una rueda de prensa en Donostia, en donde participaron el diputado foral de Política Social, Ander Rodríguez, junto a la directora de ONCE Donostia, Belén Encina; y los afiliados a esta organización Javier García y Ana Mujika, junto a sus perros guía.

El diputado explicó que el Parlamento Vasco aprobó en 2007 la Ley de Perros de Asistencia para la Atención a Personas con Discapacidad. Sin embargo, confirmó que son “conscientes de que existe un vacío” a raíz de una “queja presentada por un ciudadano con discapacidad, al que se le prohibió la entrada con su perro en un comercio de Hernani”, según indicó.

vulneración de derechos Rodríguez lamentó que esta persona “haya sufrido una vulneración de sus derechos por la falta de diligencia de la Administración en el cumplimiento de sus obligaciones”, al tiempo que aseguró que con este Decreto eso “no volverá a ocurrir”.

La directora de la ONCE subrayó que “cada año se preparan a más de un centenar de estos canes”, los cuales están capacitados para evitar “obstáculos fijos y móviles, y para buscar pasos de peatones, entradas o salidas de establecimientos, incluso localizar escaleras o paradas de transportes”, según señaló.

El afiliado, Javier García, que fue una de las primeras personas que trajo un perro guía a Gipuzkoa, confirmó la importancia de que la ley los apoye, ya que “nos dan mucha seguridad, y nadie tiene porque alterarse en espacios públicos, puesto que su comportamiento es extraordinario”. Además, remarcó que “tienen controles higiénico sanitarios”.

La ONCE ha proporcionado unos 2.000 perros guía en sus 25 años de vida a personas ciegas o con deficiencias visuales graves. De todos ellos, son más de un millar los que actualmente están en activo.

Las razas más utilizadas son el Labrador retriever, el Golden retriever y el pastor alemán, además del recién incorporado Flat-coated retriever.

El adiestramiento se realiza en la sede localizada en Boadilla del Monte (Madrid) y los usuarios se desplazan hasta allí para el periodo de adaptación y socialización.

Actualmente los gastos derivados suponen un coste de unos 31.000 euros. Pero la persona afiliada recibe esta prestación de manera totalmente gratuita, y se compromete a cumplir la legislación vigente en cuanto a sus derechos y deberes.