donostia
– Geroa Bai, EH Bildu y Contigo-Zurekin no acudieron ayer a la conmemoración del 600 aniversario del Privilegio de la Unión, celebrado en la catedral de Iruñea, en protesta por la presencia en el acto de los reyes Felipe VI y Letizia. Parlamentarios de esas formaciones sí participaron en las actividades populares programadas por la conmemoración del Privilegio de la Unión, que fue otorgado el 8 de septiembre de 1423 por el rey Carlos III el Noble de Navarra y considerado como el tratado fundacional de la ciudad.
Los actuales monarcas españoles fueron recibidos en el exterior de la catedral por la alcaldesa de Iruñea, Cristina Ibarrola, la presidenta de Nafarroa, María Chivite, y la vicepresidenta primera del Parlamento Foral, Ainhoa Unzu, ante la ausencia por enfermedad de su presidente, Unai Hualde. También estuvo presente la ministra en funciones de Política Territorial, Isabel Rodríguez, así como varios cientos de vecinos que se acercaron a las inmediaciones para ver a los reyes tras un perímetro fijado por las Fuerzas de Seguridad. Se escucharon algunos pitos e incluso vivas a Carlos III.
Asistieron asimismo el presidente de UPN, Javier Esparza; el secretario de Organización del PSN, Ramón Alzórriz; el presidente del PPN, Javier García; y la portavoz parlamentaria de Vox, Maite Nosti. Ya dentro de la catedral, mientras sonaba el himno de España interpretado al órgano, les esperaba el arzobispo de Iruñea, Francisco Pérez.
Según las notas oficiales de prensa, los reyes vivieron “un momento de recogimiento” ante el mausoleo de Carlos III El Noble y su esposa Leonor de Trastámara. Desde allí se dirigieron al Ayuntamiento de Iruñea y en el trayecto se anudaron al cuello un pañuelo rojo de San Fermín que, de forma espontánea, les entregaron unos niños. Ya en el interior, la alcaldesa puso en valor que el Privilegio de la Unión “no solamente derribó murallas exteriores” sino también “los pensamientos autoritarios, el egoísmo y los problemas de convivencia”.