Las localidades costeras de Mutriku y Deba se dejaron atrapar ayer por sus raíces rurales para disfrutar de sendas ferias en las que los productos del campo coparon buena parte del protagonismo. Después de demasiadas jornadas marcadas por una lluvia constante, el clima optó por dar un respiro y regaló a los que se dieron cita en ambas localidades una mañana soleada que animó a la gente a salir a la calle a y disfrutar de la fiesta.
La plaza Berasaluze fue el núcleo de la feria especial de navidades que tuvo como marco a Deba. La gente que se dio cita en ella a lo largo de la mañana y el mediodía de ayer tuvo la oportunidad de adquirir desde productos de la huerta a sidra, pasando por queso y una amplia variedad de panes y de postres de diverso tipo que ayudaron a completar el menú de las comidas y las cenas del fin de semana de muchas casas. La feria también ofreció un espacio para la artesanía con trabajos en madera y de otros tipos a los que se sumó también una zona de juegos atendida por la Cruz Roja que permitió disfrutar de una divertida mañana a los más pequeños.
La cita marcó el inicio de la atractiva agenda de actos programada con motivo de las celebraciones navideñas. Este programa vivirá uno de sus hitos más destacados el primer sábado del año 2024 con la feria agrícola y ganadera de la Urteberri Azoka. Este cita tiene además un aliciente muy especial ya que, debido a las veleidades del calendario, va a tener lugar el 6 de enero, lo que la hará coincidir con el día de Reyes, por lo que el ambiente festivo en Deba está doblemente garantizado en esa jornada.
Gran ambiente en Mutriku
A pocos kilómetros de Deba, la localidad de Mutriku también puso ayer en valor la labor de los baserritarras con la celebración feria de Santo Tomás. Como viene siendo tradicional, los mutrikuarras festejaron el día de Santo Tomás coincidiendo con la jornada del sábado, lo que dio pie a que muchos vecinos de los pueblos de alrededor aprovecharan la soleada mañana de ayer para acercarse hasta Mutriku. Goiko Plaza y su entorno fueron el corazón de la feria. Desde primeras horas de la mañana la afluencia de visitantes fue notable. Los alrededores de la parroquia y el parque infantil sirvieron de punto de encuentro a los puestos de exposición de animales, un clásico en este tipo de celebraciones. Cabras, ovejas, vacas, aves, cerdos y otros animales concitaron un enorme interés, en especial por parte de los más pequeños, que no perdieron la ocasión de verlos de cerca y de acariciarlos. A pocos metros de allí, Goiko Plaza se fue convirtiendo en un hervidero de gente a medida que se acercaba el mediodía, La gente recorría los distintos puestos y, en muchos casos, echaba mano de la cartera para adquirir alguno de los productos expuestos. La oferta era amplia ya que incluía desde verduras, a dulces, pasando por sidra y variados productos de artesanía. Por si esto no fuera suficiente, varios puestos se encargaban de saciar el apetito de lo asistentes con la venta de pinchos de distintos tipo. Entre todos estos puestos brilló con luz propia el puesto de venta de talos elaborados por las expertas manos de una mujeres llegadas desde Ataun. Como es habitual en este tipo de casos, las colas para obtener el codiciado bocado y acompañarlo de ingredientes tan variopintos con la txistorra, la tocineta, el queso o el chocolate, fueron enormes desde que empezaron a repartir los primeros talos, y se mantuvieron así a lo largo de la mañana, hasta que la feria llegó a su conclusión, bien avanzado el mediodía.
La música no podía falta en una celebración de este tipo y en esta apartado merece destacarse la labor de las jóvenes componentes del grupo de trikitilaris de Mutriku, que animaron las calles del casco antiguo de las localidad con las alegres piezas que interpretaron durante el pasacalle. La música ayudó a que la satisfacción por el gran ambiente de fiesta que se estaba viviendo en Mutriku fuera general, más allá de las ventas que se pudieron realizar . “Es cierto que en esta feria las ventas que solemos hacer no suelen ser muy grandes. Hay ferias de otros pueblos como Markina o Elgoibar en los que el tema de las ventas suele ir mejor, pero el ambiente en Mutriku está siendo muy bueno y es muy bonito ver a tanta gente reunida en la plaza en un día como el de hoy”, señaló Idoia, la joven que atendía el puesto de venta de mermeladas de la firma mutrikuarra Ondare.
Las celebraciones vinculadas a la tradición rural de Mutriku continuarán con la disputa del Campeonato de Gipuzkoa de Herri Kirolak en Beheko Plaza hoy a partir de las 12.00 horas. La competición consta de tres pruebas (ingude altxatzea, orga jokoa y txinga) y entre los participantes habrá varios miembros de Mutriku Sokatira Taldea. Urdax Agirregomezkorta competirá en la prueba orga jokoa, Unai Goitia en la del ingude y Jabier Urresti en la de txinga.
