El Athletic parte con ventaja en la segunda semifinal de la Copa tras ganar por un 0-1 en el Metropolitano que deberá defender en San Mamés. El conjunto vizcaino se impuso gracias a un penalti materializado por Berenguer tras una falta clara del defensor Reinildo sobre Beñat Prados.
Tras un ligero dominio del conjunto local en los compases iniciales, el Athletic amenazó a la contra. Cada vez que robaban, los bilbainos no se lo pensaban y salían veloces en busca del área rival. Y en uno de sus ataques, Reinildo cometió un claro e incomprensible penalti sobre Prados en el minuto 22. El defensa africano sólo vio la tarjeta amarilla, aunque los visitantes reclamaron la roja al entender que era el último hombre. Berenguer no falló desde los once metros.
El gol dejó un tanto noqueados a los colchoneros, que trataron de rehacerse con el paso de los minutos. Así, en el minuto 36 Memphis desaprovechó una clara ocasión en un fallo de Agirrezabala al taponar Paredes su disparo. Griezmann, que bajaba a recibir para lanzar los ataques de su equipo, disfrutó de otra oportunidad en el minuto 40, pero su lanzamiento se marchó fuera por poco. Ocasiones que no pudo materializar el Atlético, por lo que los de Ernesto Valverde se fueron al descanso con el tanto de penalti.
En la segunda mitad, ya sin Reinildo porque lo sustituyó Simeone, el cuadro madrileño, espoleado por su público, apretó en busca del empate. Depay lo pudo hacer, pero más clara fue la ocasión que desperdició después Villalibre, solo ante Oblak, que había rechazado un tiro de Unai García.
El partido subió de revoluciones, sobre todo con las protestas locales por varias decisiones arbitrales. Griezmann y Morata tuvieron en sus botas el gol de la igualada, pero el portero guipuzcoano, que cuajó una gran actuación, desbarató ambas opciones. Correa también pudo marcar más tarde, pero el gol no llegó. Y tampoco lo hizo por mediación del penalti de Yeray a Morata pitado por el árbitro que el VAR anuló por fuera de juego del delantero.