'First Dates' no deja de dar sorpresas y dejar atónitos a los seguidores del formato.

La entrega de este martes, 1 de febrero, arrancaba como la de cualquier otro día. Todo parecía normal y un comensal entraba el restaurante del programa para comenzar una cita, sin embargo, la situación terminó dando un giro radical cuándo Carlos Sobera sacó una tablet y mostró al participante unas imágenes que no tenían nada que ver con la cita.

SOBERA DESTAPA A UN FARSANTE

El presentador de 'First Dates' no sacó la tablet por casualidad, Sobera le enseñó al comensal una grabación de las tres anteriores visitas del participante al programa, aunque en aquellas ocasiones lo hizo bajo otro nombre y con una apariencia muy diferente.

Esta 'pillada' por parte del conductor del espacio de Cuatro dejó perplejos a los espectadores, que no tardaron en compartir el momento, publicar bromas, criticar la forma de proceder del comensal o aplaudir la actitud de Carlos Sobera.

David, esa era el supuesto nombre del participante, llegó esta vez al restaurante de 'First Dates' como uno más, aunque haciendo gala de una peculiaridad en la voz: tenía una voz aguda que relacionó con una puberfonía o falsete mutacional, un trastorno que provoca que la voz se mantenga aguda e infantil.

Sobera prefirió empezar la conversación con normalidad para después sacar la tablet y mostrar a un hombre de pelo afro que se hacía llamar Jesús, y David reconoció sin ningún tapujo que era él: "Soy yo. Estaba esperando este momento", decía con mucha naturalidad.

Sin embargo, esa no era la única vez que había pisado el restaurante. El presentador puso otra serie de imágenes en las que volvía a aparecer el comensal con otra apariencia distinta y con un modo de andar diferente, e incluso hubo una tercera ocasión en la que se presentó como Abilio, con un moño gris, barba y voz rasgada.

"Aunque me veas sonriendo, no te estoy vacilando, Carlos", aseguraba el participante, mientras el vasco le preguntaba por su verdadera identidad y este admitía, sin rodeos, que su nombre real era Jesús.

"El problema no es que nos engañes a nosotros, que eso no va a ningún sitio. El problema es que la gente que viene a citarse contigo, buscando el amor de verdad, los has engañado a todos", apuntaba Sobera y añadía que su actitud había dañado el prestigio del programa: "¿Te das cuenta de que has jugado con el prestigio de 'First Dates'? Nosotros estamos aquí no para hacer tonterías, sino para que la gente encuentre el amor", le recriminaba y le reprochaba que hubiera jugado con la gente que se había citado con él.

El comensal solo ha argumentado que lo hace "por instinto", una respuesta que no ha gustado al conductor del espacio.

"Yo, sinceramente, creo, salvo que estuvieras enfermo, que no tienes ninguna justificación", aseguraba Carlos Sobera y afirmaba que era "difícil" aceptar las disculpas que ofrecía el participante.

"Esto es un programa de citas de verdad, lo he comprobado todas las veces que he venido. Siempre había personas que estaban nerviosas esperando su cita". "Fue una broma de muy mal gusto. No tiene ningún sentido", comentaba David.

Carlos Sobera zanjaba el tema antes de pedirle que se fuera del restaurante y le pedía que no jugara con el trabajo de la gente que estaba allí: "Páralo ya y déjalos en paz, como te voy a pedir que nos dejes en paz a nosotros. Hacemos esto en serio, porque creemos en ello. Siempre hay voces que dicen: son actores los que vienen. Y tú lo único que has hecho es echarnos mierda con tu actitud", concluía, antes de hacer al comensal abandonar las instalaciones.