Comer más de lo que nuestro organismo necesita es una de las principales causas de obesidad. Por ello es esencial saber calcular la cantidad de alimento que debemos ingerir en cada comida.

Podemos recurrir a balanzas de cocina o a otros instrumentos para medir las raciones de forma más exacta. Sin embargo, algo tan sencillo como nuestra mano puede convertirse en una herramienta eficaz para hacerlo.

Se trata de un método muy simple y, sobre todo, muy práctico, ya que el medidor lo llevas siempre contigo.

Así, con poco esfuerzo, podremos seguir nuestra dieta en cualquier lugar y no tendremos excusa para alimentarnos de la forma más correcta posible. Las raciones variarán dependiendo de la persona, el ejercicio, la edad o el sexo.

Este sencillo método fue creado hace más de 30 años en África por el doctor Kazzim G.D. Mawji, un médico especializado en diabetes que quería que la población, mayoritariamente analfabeta, aprendiera a alimentarse correctamente para evitar esta enfermedad. En 1993, fue presentado en EEUU y así se dio a conocer en todo el mundo.

“Tomando como referencia el tamaño de tu mano, puedes calcular de forma aproximada las cantidades de distintos alimentos para crear tu plato”, se puede leer en la publicación de Instagram de Academia Realfooding, cuenta especializada en brindar tips de nutrición.

¿Cómo nos indica nuestra mano las raciones de comida adecuadas?

De una forma sencilla y con un método didáctico tenemos en nuestras propias manos las claves para una alimentación más saludable. Concretamente:

- La palma de la mano y el grosor del dedo meñique. Nos dan la cantidad de proteínas, como carne, pollo, pescado, etc, que podemos comer en una ración.

- El puño cerrado. Nos indica la medida de hidratos de carbono como cereales, arroz, pasta, pan, patatas, etc que equivale a una ración. También es la medida de una ración de frutos secos.

- La punta del dedo índice o del pulgar. La punta del dedo índice equivale a una ración de grasas, como el aceite o la mantequilla, y a una ración de azúcar. Para el caso de la crema de cacahuete, se mide con la punta del dedo pulgar.

- Dos dedos juntos. La medida, a lo largo y a lo ancho, de los dedos índice y corazón juntos, nos da la cantidad de queso que supone una ración.

- Las dos manos juntas y abiertas. Miden la cantidad de hortalizas y verduras que podemos comer. Algunos vegetales crudos, como la lechuga, ocupan mucho volumen y por ello no importa que, por ejemplo, una ensalada ocupe todo el plato.

- La mano abierta en forma de cuenco. La pieza de fruta que encaje en ella será una ración. También marca el tamaño de una ración de legumbres.

Y siguiendo con la mano como medidor, podemos decir que los cinco dedos indican el ideal de las cinco comidas diarias y las raciones de fruta y verdura que deberíamos comer a lo largo del día.