Euskadi tiene una enfermera escolar por cada 21.100 alumnos, una proporción peor que la estatal -8.500 estudiantes por enfermera-, según un estudio del Consejo General de Enfermería, que lamenta la presencia "anecdótica y claramente insuficiente" de estas profesionales en muchas comunidades.

"La diferencia entre que un colegio cuente o no con una enfermera escolar puede llegar a ser la vida o la muerte", explican los enfermeros, que califican de paradójico que en el Estado español sea obligatorio contar con una enfermera del trabajo en empresas con más de 500 trabajadores, pero no lo sea en centros escolares con varios cientos e incluso miles de alumnos.

Así lo ha dicho este miércoles Florentino Pérez Raya, presidente de la entidad, en la presentación del estudio (elaborado por el Observatorio de Enfermería Escolar del Consejo, sociedades científicas y universidades), que ha arrojado "resultados muy preocupantes".

GRANDES DIFERENCIAS ENTRE COMUNIDADES

Asturias sólo cuenta con una enfermera para 131.480 alumnos, Castilla-La Mancha con 22 para 335.308 y Canarias con 10 para 326.105. En Euskadi hay 17 profesionales para 369.453 alumnos.

En todo caso, según el Consejo, en muchos casos los datos no reflejan la figura de la enfermera escolar asignada a un centro de enseñanza, sino que son refuerzos esporádicos contratados por la pandemia de covid, como sucede en Andalucía.

También hay enfermeras que acuden desde el centro de salud con programas coordinados en Catalunya o Murcia, comunidad que solo tiene 16 profesionales escolares y el resto comunitarias, por lo que no se cubren las necesidades que tiene la comunidad escolar, según ha resaltado Guadalupe Fontán, enfermera coordinadora del Instituto de Investigación Enfermera.

DIFERENCIAS CON EEUU Y LOS PAÍSES NÓRDICOS

Para Engracia Soler, presidenta de la Asociación Científica Española de Enfermería y Salud Escolar (ACEESE), la situación en España es "alarmante" respecto a lo que marca la Asociación Norteamericana de Enfermería Escolar (NASN), que sigue las recomendaciones de la Asociación Internacional de Enfermería Escolar) y que establece una ratio de una por cada 750 alumnos y una por cada 350 en aquellas escuelas de educación especial.

Una ratio aun más baja existe en Finlandia, donde se sitúa en 600 alumnos por enfermera y en escuelas de educación especial a 300, según Soler que destaca que en la mayoría de países anglosajones y escandinavos esta figura está incorporada en el sistema, es valorada y totalmente aceptada.

En este sentido, Soler lamenta que en el Estado español, aunque aumenta la demanda de la presencia de esta figura, no se la valora ni reconoce socialmente debido a que su trabajo en la salud escolar sigue siendo desconocido.

RECOGIDA DIFICIL DE DATOS

La realización del estudio ha sido muy complicada, ante la inexistencia de registros oficiales, por lo que los expertos han tenido que recabar información de los centros de educación primaria y secundaria públicos, privados, concertados y de educación especial.

El Consejo también ha explicado que las contrataciones, las condiciones laborales y la dependencia funcional también son muy variadas. En la mayoría de los casos dependen de las consejerías de Educación, pero también de los servicios autonómicos de salud, de los Ayuntamientos o de empresas privadas.

LOS ENFERMEROS PIDEN UNA LEY DE ENFERMERÍA ESCOLAR

Los profesionales piden que se implante la figura de la enfermera escolar en todos los centros educativos y que se ponga en marcha una Ley de Enfermería Escolar para garantizar la estabilidad de los profesionales, la adquisición de competencias específicas y la creación de una bolsa de trabajo única.