- Osakidetza implementará dos nuevas herramientas no presenciales de ayuda en los centros de salud de Atención Primaria para las personas que quieran dejar de fumar: el programa de terapia combinada de tratamiento y seguimiento profesional junto a una aplicación móvil y la intervención grupal online, que reforzarán los tratamientos que se ofertan en Osakidetza.
El programa de terapia combinada contará con el seguimiento del profesional sanitario, que podrá ser no presencial ya que en los últimos meses se ha modificado la aplicación para ello y podrá ser ofrecido en julio. Por su parte, para la oferta de intervención grupal online, en junio está previsto el inicio del pilotaje de este nuevo tratamiento con un grupo de 10 personas para poderse ofertar en septiembre.
Así lo anunció ayer la consejera de Salud, Nekane Murga, que incidió en que “el consumo de tabaco es un factor de riesgo que empeora el estado de las personas que se contagian por COVID-19” y resaltó que, un año más, el Departamento de Salud y Osakidetza se sumarán el domingo al Día Mundial sin Tabaco.
“Para seguir avanzando hacia una Euskadi libre de humo de tabaco, el Departamento de Salud y Osakidetza seguirán abordando de forma integral el tabaquismo en todos los ámbitos y dedicando esfuerzos a políticas dirigidas a la prevención y la sensibilización y la oferta de tratamientos para el abandono del tabaco”, aseguró la consejera.
También reiteró que seguirán trabajando en programas como Kerik gabeko gazteak -que se desarrolla en las escuelas- o la red vasca de organizaciones sanitarias libres de humo -que trabaja activamente para asegurar un ambiente libre de humo en todo el entorno de los centros sanitarios-.
Al fin y al cabo, según informó Murga, en Osakidetza hay 93.629 personas registradas como fumadoras y, de ellas, el 56,6% son hombres. Además, el grupo de edad donde se concentra el mayor número de personas consumidoras de tabaco es de 46 a 64 años. “Hasta los 45 años apenas existen diferencias entre hombres y mujeres. Entre jóvenes de 16 a 25 años, el número de fumadoras supera el de fumadores, sin embargo, a partir de los 46 años el predominio es claramente masculino”, destacó.
Subrayó también “el compromiso político y de profesionales sanitarios, asociaciones, educadores y educadoras y agentes sociales que han permitido con su implicación y labor que se desarrollen programas y políticas en Euskadi con el objetivo de proteger a la población del humo de tabaco y ofrecer ayuda a quienes quieran dejar de fumar”.
