La Real Sociedad estudia durante la mañana de este martes impugnar la votación que menos de 24 horas antes, el lunes, decidió el reparto de grupos en la Primera RFEFreparto de gruposPrimera RFEF. El filial blanquiazul, el Sanse, participará la próxima temporada en la tercera categoría del fútbol estatal, pero el club txuri-urdin no pudo participar en dicha votación por culpa de un error en el proceso telemático. Según ha podido saber este diario, el reparto final de los 40 equipos en dos ligas de 20 se decidió por un escasísimo margen, lo que convertiría en clave el hecho de que la Real no tuviera la opción de emitir su sufragio. En la entidad valoran ahora mismo qué medidas pueden tomar ante lo acontecido.

El Sanse quedó encuadrado en un grupo que compartiría con los clubes vascos (incluido el Real Unión), navarros, riojanos, baleares, catalanes, valencianos y murcianos, además de con el Numancia castellano-leonés. Así sucedió al salir ganadora en la votación la opción que dividía la península en zonas este y oeste, por delante de la posibilidad que implicaba trazar una diagonal en la propia península. Esta segunda vía encuadraba al filial realista con equipos gallegos, extremeños, con todos los castellano-leoneses y con parte de los madrileños, además de con vascos, navarros y riojanos.

Siempre resulta relativo hablar a estas alturas de la dificultad que entrañaba para el Sanse uno y otro grupo. Pero, sobre el papel, la opción ganadora implicaría para los potrillos, al hacerles medirse a clubes de la costa mediterránea llamados a diseñar ambiciosos proyectos. Sería el caso del Atlético Baleares, el Sabadell, el Barcelona B, el Gimnàstic de Tarragona, el Castellón, el Real Murcia o incluso el pujante Intercity de Alicante.