La rueda de prensa de Natalia Arroyo de hace escasos minutos ha servido para ver la versión más inconformista de la entrenadora de la Real. “Sí se puede hacer un poquito mejor”, ha respondido a la pregunta sobre si su equipo puede mejorar sus prestaciones. En este sentido, asegura que “las sensaciones y el video nos están demostrando que lo estamos haciendo bien”, y eso es algo que “le da confianza al grupo para que lo siga haciendo”. Pero aún y todo “hay algunos aspectos que no estamos haciendo tan bien, tanto con balón como sin balón”, analiza. “El grupo sabe que está a un nivel alto, pero quiere estarlo un poco más y ha habido partidos en los que hemos concedido más de lo que queremos y ha habido días en los que no hemos generado todo lo que podríamos en diferentes situaciones”, confirma. En resumen, “queremos mejorar sin torturarnos porque el equipo está haciendo muy bien las cosas”.

Respecto a la última victoria, la conseguida frente al Villarreal, elogia “el temple que tuvo el equipo”. Estima Natalia que el equipo amarillo “planteó dificultades, entró muy bien al partido y nos llevó a su terreno en ritmo de juego y balones más largos, pero supimos bajar pulsaciones y encontramos la vía otra vez”, destaca la catalana.

Califica el partido de mañana ante el Real Madrid de “importante” porque “jugamos en casa, porque nos viene alguien que va a tener ganas de ganarnos, alguien que está por debajo en la clasificación y quiere recuperar y recortar puntos”. También es fundamental porque “todo lo que sea ganar en Zubieta y dejar más atrás a un adversario que al principio de temporada era uno de los aspirantes a estar muy arriba y ahora no lo está, lo es”. Por eso, espera un partido “de máxima exigencia y de alto voltaje”. Reconoce, claro está, que el equipo blanco “no es un rival cualquiera”.

Entiende que el Real Madrid “llega creciendo” después de un arranque con dudas, sobre todo en Liga, que “les afectaron al encaje de las nuevas piezas”. Recuerda que el cuadro merengue se había movido “bastante” en verano y “eso pide su tiempo”. Ahora, con la llegada de Toril, “el equipo ha sacado resultados, algo que era urgente”. Para Natalia, el nuevo entrenador “le ha dado estabilidad” al grupo. “Ha encontrado un esqueleto y le ha dado más continuidad. Nos vamos a encontrar un rival que levanta muy rápido el partido ante el Sevilla y que se lleva muy buenas sensaciones de la Super Copa pese a la eliminación porque le lleva al Barça hasta el minuto 90”. No olvida que el Madrid vendrá “con muchas ganas” porque “les ganamos en su campo”.

Los elogios no paran hacia el Real Madrid. “Es un equipo muy completo en lo individual. Estamos hablando de una de las plantillas más potentes de la Liga, desde el diseño y lo equilibrado”. A Natalia le parece un equipo “de muchas posibilidades” porque “te juega muy bien por fuera, por dentro, te puede jugar desde la profundidad y lo combinativo”. Por todas estas cuestiones, entiende que “tienes que hacerle distintas cosas” porque “si intentamos progresar solamente por dentro, vamos a tener dificultades porque eso lo van a defender bien. Tienen gente muy agresiva”. Para Natalia, “vamos a tener que ser una Real completa, variada e intensa”. Además pide “estar alerta, que tengamos los cinco sentidos puestos en el partido y variarles”.

“Ojalá Nahikari no se destape en Zubieta”

Mañana enfrente estará una vieja conocida por estos lares como es Nahikari García, que no termina de despuntar en el Real Madrid. “Algunos malos resultados no han hecho sencillo el rodaje de las nuevas piezas”, asegura Natalia Arroyo, “convencida” de que si hay una jugadora “que no se va a rendir esa es Nahikari. Tiene ese sello”, puntualiza. “Peleó por ir al Madrid, en un movimiento ambicioso de su parte. Le esta costando porque al equipo le ha costado y es que cuando los entrenadores empezamos a sentir la necesidad de tocar cosas, las jugadoras son las que salen mal paradas”, confiesa. En su opinión, cree que Nahikari “ha hecho buenos partidos” y está segura de que “le va a dar cosas que el Madrid va a necesitar, porque tiene remate e impacto goleador alto”. Recuerda que el año pasado también le costó abrir lata y acabó marcando una decena. No olvida el hecho de que “después de haber sido todo en la Real, cambiar es difícil en lo personal, pero si tiene que destapar, que no lo haga en Zubieta, que lo haga más adelante, que se espere al jueves”. Pese a todo, Natalia Arroyo la pone como ejemplo para las que suben por “su coraje para competir”.