- Si La Cartuja será recordada por ser el escenario donde la Real conquistó la Copa, el Francisco de la Hera de Almendralejo lo será por ser el estadio en el que el Sanse logró el ascenso a Segunda División 60 años después de haber militado por última vez en la categoría de plata. Un éxito aún más meritorio si tenemos en cuenta que el del club txuri-urdin será el único filial que compita el próximo curso en Segunda. En otras épocas, los segundos equipos de entidades poderosas, como el Real Madrid o el Barcelona, militaban en esta división, pero hoy en día es un reto complicado este que ha conseguido el conjunto dirigido por Xabi Alonso.

Además, siguiendo las pautas de juego, de trabajo y de hábitos marcadas por el primer equipo. Algo que habla bien a las claras del gran trabajo que se está realizando en Zubieta para que cuaje una filosofía de cantera que cada vez se hace más evidente en la Real. De hecho, en su plantilla de la temporada pasada militaron 16 jugadores formados en Zubieta. Todo un logro en un fútbol en el que se mueven tantos millones de euros.

Tratar de permanecer en una larga y competitiva Segunda División es el reto que tiene por delante una Real B cuyo principal objetivo es ascender futbolistas al primer equipo. Esto no debe de cambiar.