- Resulta curioso. La semana pasada, la Real viajó a Cádiz envuelta en comentarios y noticias sobre los efectos que tendría un triunfo en el Carranza. Si ganaba, que ganó, igualaba un máximo histórico de victorias consecutivas en Liga: seis. Siete días después, los txuri-urdin encaran esta noche la posibilidad no ya de empatar la marca, sino de superarla y establecer una nueva. Pues bien, el asunto parece haber pasado a un segundo o tercer plano, consecuencia de la resaca europea post Alkmaar. Los de Imanol firmaron tablas en el campo del AZ, un resultado que, sin ser para echar cohetes, les mantiene muy vivos en la liguilla y que sin embargo ha sido acogido con ciertas dosis de pesimismo. ¿Estaremos mal acostumbrados? Mérito de este equipo. Otro más.

Lo cierto es que el día de hoy invita a la ilusión en clave txuri-urdin. Porque ganar el partido de esta noche tendría premio doble. Por un lado, el citado récord de las siete victorias consecutivas. Por otro, la seguridad de mantener el liderato una semana más, dando continuidad al sobresaliente arranque liguero completado. Si hilamos fino, podemos decir incluso que vencer al Villarreal conllevaría una tercera ventaja, unida a esta segunda. Madrid, Barcelona y Atlético, atraviesen el momento que atraviesen, están llamados a terminar en la zona alta de la clasificación. El Valencia no parece llamado a participar de la fiesta este curso, y lo mismo puede sucederle a un Sevilla cansado tras su agotador verano y muy vivo en la Champions. ¿Y el Villarreal? Pues el Villarreal apunta a posible rival directo a final de curso en la búsqueda de objetivos ambiciosos. Superarle hoy en Anoeta dejaría a los amarillos a siete puntos y encarrilaría el average particular. Resulta pronto aún para hablar de estas cosas. Pero siempre es mejor caminar por delante que por detrás.

Tiene toda la pinta de que el canario no podrá ser hoy de la partida, por mucho que lo haya intentado durante las últimas horas. El club facilitó ayer un vídeo del entrenamiento y una batería de fotos de la sesión: en ningún caso se observa la figura del menudo mediapunta, quien debería esperar a futuros compromisos para reaparecer, aunque lo cierto es que ahora mismo no está descartado para esta noche. Imanol vio ayer cómo sí podía sumarse al trabajo colectivo Andoni Gorosabel, alternativa firme para el lateral derecho. Y se entrenó igualmente Asier Illarramendi, con quien conviene avanzar con pies de plomo. Buena noticia, en cualquier caso, los progresos del capitán. En lo que se refiere al posible once txuri-urdin, pueden esperarse algunos cambios respecto a Alkmaar. Por ejemplo, en los laterales, con el citado Gorosabel optando a la titularidad y Aihen emulándole en el costado opuesto. Guevara, habitual en la Liga, puede sentar en el banquillo a Zubimendi. Y en la posición de interior derecho parece que Mikel Oyarzabal va a desempeñar el rol de Januzaj contra el AZ. Esto podría no implicar la suplencia del belga, quien formaría en el extremo diestro, con Willian José como ariete y la incógnita de la banda izquierda. Merquelanz, Barrenetxea e incluso Portu optarían a la vacante dejada por Oyarzabal, con muchas opciones para el irundarra, a quien le llegaría así la ansiada oportunidad.

Enfrente estará el Villarreal, tercer clasificado a solo cuatro puntos de la Real. Como los txuri-urdin, se encuentra inmerso en la Europa League, pero dentro de una liguilla de nivel poco exigente. Esto permite a Emery rotar los jueves y reservar para los domingos a los teóricos titulares, cosa que volverá a suceder hoy. El hondarribiarra, como Imanol, esperará a las horas previas para ofrecer la convocatoria. Paco Alcácer es la principal duda amarilla.