El presidente del PNV, Andoni Ortuzar, ha asegurado que, para sanar "plenamente" las heridas del pasado, "es preciso llamar a las cosas por su nombre", decir que "matar estuvo mal", que "ETA nunca debió existir" y que "condenamos todos los atentados y todas las violencias".

Ortuzar ha hecho esta reflexión en la localidad alavesa de Maeztu, un día antes del homenaje preparado por el Ayuntamiento de Ermua (Bizkaia) en recuerdo del concejal del PP Miguel Ángel Blanco, secuestrado y asesinado por ETA hace 25 años.

El líder jeltzale ha asistido a la cuarta edición del Alderdikide Eguna, un acto que ha servido para recordar las figuras de los dirigentes alaveses del PNV Xabier Agirre y Félix Ormazabal recientemente fallecidos y en el que también han participado el presidente del PNV en Araba, José Antonio Suso, y la senadora Estefanía Beltrán de Heredia.

Llamar a las cosas "por su nombre"

Durante su intervención, Ortuzar ha señalado que "para tener un proyecto abertzale sano, este país no puede tener abiertas las heridas del pasado" y ha recalcado que, "para sanar plenamente esas heridas, a las cosas hay que llamarlas por su nombre" con el objetivo de "construir juntos un futuro", ha informado el PNV en una nota,

"En esa tarea el PNV se va a implicar, ahí nos van a encontrar en todo momento, pero siempre llamando a las cosas por su nombre y diciendo lo que hay que decir, que es además un clamor mayoritario de la sociedad vasca: que matar estuvo mal, que ETA nunca debió existir, que condenamos todos los atentados y todas las violencias", ha subrayado el líder jeltzale.

Ortuzar ha mantenido además que su partido "siempre ha estado en la lado correcto de la historia, ya fuera en la Guerra Civil, en la dictadura, en la transición o en los 'años de plomo'", algo que, en su opinión, "no todos en este país pueden decir".

Una alusión con la que, según ha desvelado, ha querido dirigirse a quienes, frente al "modelo ético" jeltzale, "todavía son incapaces de llamar a las cosas por su nombre".

Ni condenan, ni piden perdón

"Me refiero a quienes se escapan con falsas disquisiciones, con su 'sí pero no'. Me refiero a quienes, 25 años después, aún se refugian en declaraciones genéricas pero ni condenan ni piden perdón por tanto daño injusto causado", ha aclarado Ortuzar, quien ha reclamado que nadie pretenda ahora "dar lecciones de ética" a su partido porque "lega 25 años tarde, o más".

En otro momento del acto, el presidente del PNV en Araba, José Antonio Suso, ha destacado el compromiso de Félix Ormazabal y Xabier Agirre y el trabajo que ambos realizaron, como diputados generales de Araba, "en beneficio del desarrollo del territorio alavés y de una sociedad plural que exige diálogo y acuerdo".

"Convulsión global"

Por su parte, la senadora Estefanía Beltrán de Heredia, ha resaltado la importancia de "actuar desde lo local en medio de esta convulsión global", al tiempo que ha abogado por "estar cerca de la ciudadanía para dar respuesta rápida, ágil y certera", como lo han hecho los alcaldes "incluso en los momentos más duros de la pandemia".

"Visto con las luces de media distancia que da vivir la política de Madrid, donde todo es improvisación, incoherencia y un gallinero sin orden ni concierto, una toma mayor conciencia del valor del trabajo reflexivo, de la importancia del diálogo y del acuerdo en política para dar respuesta a las necesidades de la ciudadanía: eso que llamamos 'modelo PNV'", ha concluido.

Durante el Alderdikide Eguna, en el que también ha tomado parte el alcalde de Arraia-Maeztu y presidente de la Cuadrilla de Montaña Alavesa, Anartz Gorrotxategi, las viudas de Agirre y Ormazabal, Mari Paz Garagalza y Elena Armengol, respectivamente, han recibido de manos de Andoni Ortuzar una simbólica "argizaiola" y sendas fotografías dedicadas.