e aquí, en mitad de una pandemia a la que la mayoría tenemos más respeto de lo que algunos creen, varias perlas que se han soltado en los últimos días. En primer lugar€ "El metro es un lugar seguro porque la gente no va abrazada", dijo Isabel Díaz Ayuso (presidenta de la Comunidad de Madrid) sin ningún tipo de rubor para salir al paso de las aglomeraciones producidas en los vagones durante el temporal. La segunda€ "Lo hemos pasado quizá mejor de lo que debíamos haberlo hecho en Navidad y ahora tenemos que asumir lo que va a suceder", amenazó Fernando Simón (la cara más conocida de 2020), que no dudó a la hora de generalizar un comportamiento que muchos no hemos tenido. Te privas de estar con los tuyos y de celebrar estas fechas tan señaladas para tener que recibir después una reprimenda de forma indiscriminada. Y para completar este particular podio€ "No se contagian en las aulas, sino en el bar de enfrente", advirtieron desde la Universidad de Sevilla, una institución que se supone seria, para responder a la solicitud de exámenes online de 4.000 estudiantes por el riesgo de contagiarse de COVID-19. No es ninguna parodia, lo prometo. El coronavirus, además de afectar severamente a la salud, está sacando lo peor de algunas personas. Y esto sí que es preocupante.