ranquilidad, que lo de la selectividad no es para tanto. Sí, ya sé que eso lo decimos los que la hemos pasado y que cuando nos tocaba hincar codos no nos convencía demasiado el mensaje, pero es así. Que este año es un poco más rara, sí, pero sobre todo porque se acortan las vacaciones; si algo tenía de bueno la selectividad es que te dejaba el verano más largo de tu vida porque el curso acababa antes y la universidad, vaya, empezaba mucho más tarde que el instituto. Pero por lo demás es casi igual. Bueno, este año además es más flexible a la hora de pasar los exámenes, lo que equivale a decir más fácil, pero no se dice porque bueno, tampoco se trata de quitar méritos a los que la superaréis tras esta pandemia que os ha tenido secuestrados en casa, un poquito de los nervios y con las bibliotecas cerradas, esa terapia de grupo tan útil y necesaria. Menudo mérito tenéis. En las páginas 8 y 9 llevamos tres ejemplos, pero sois muchos más. Y sobre las medidas, todo es parecido, tranquilidad. Ahora os piden guardar distancias, antes, buscabas tú el aislamiento para no ponerte más nervioso en los corrillos y también tenías que llevar tu propio material porque sí, podías pedir un boli a un compañero en mitad del examen, pero igual se creían que estabas copiando así que era mejor llevar de repuesto. Ya está casi, ya lo tienes, solo te queda dejarlo por escrito. Confiamos en ti.
