hace un mes, un tipo tuvo su minuto de gloria porque se supo que cada vez que su mujer celebra un cumpleaños redondo (40, 50 años) le regala una señal de tráfico con el número correspondiente. La historia, cómo no, se hizo viral, y el hombre en cuestión tuvo que aclarar que, después de hacer la obligatoria foto en casa, devuelve a su lugar la señal de prohibido circular a más de 40 o 50 km/h. A finales de los años 80, nuestro equipo de fútbol andaba tieso de pasta y cometimos un delito. Como ha prescrito, lo cuento. Volvíamos de un partido y, al pasar por las obras de una carretera, no tuvimos otra ocurrencia que robar los conos. Durante años los usamos en los entrenamientos. Mi padre solía contar cómo en una fábrica había sufrido el robo de botes de pintura mientras estaba subido en el andamio. Pequeños hurtos, que se dice en la jerga de las policías. En navidades hay quien se pone las botas. El Ayuntamiento de Bilbao calcula que cerca del 20% de los adornos navideños que coloca cada año en sus calles desaparecen. Estas últimas navidades se ha llevado la palma Cambados (Pontevedra). Unos desconocidos robaron dos renos de madera y los devolvieron sin ojos y con daños en la cornamenta. Desde que se hizo popular el Frente de Liberación de Enanos de Jardín no se conocía nada igual.