Hoy también toca esto
Los partidos autoproclamados de izquierda y portadores de la voz de las personas trabajadoras (como si no hubiera suficientes muestras sociológicas de que al PP también le han votado en “barrios obreros” y que en Vox no solo confiaron los señoritos andaluces) hoy están de reivindicación: es 1 de mayo y estamos a la puerta de otras elecciones, así que toca foto. Pero más nos valdría que se pusieran con los problemas derivados del empleo y las cotizaciones, de una vez: en El Blog Salmón alertan de la gravedad real del problema de las pensiones que los partidos, especialmente los de izquierda, eluden.
Robots que controlan a las personas
Este Primero de Mayo también podemos celebrar, o no, que estamos en el siglo XXI y las condiciones laborales son como las soñábamos en el siglo XX, o casi: esclavos que te traen en una bici lo que quieras de la calle, empresas que organizan a taxistas sin licencia, o robots que califican a trabajadores en función de su productividad en una empresa maravillosamente valorada por los usuarios como es Amazon. Una caca pinchada en un palo. Pero ya lo he dicho en el párrafo anterior: hoy toca hacer política vía foto y vía tuit, y no meter mano a la derivada más perversa que nos ha traído la tecnología.
La derechita victimista
Santiago Abascal o alguno de los pensadores de la extrema derecha (ya sé que acabo de escribir una contradicción como la copa de un pino) pusieron de moda la idea de “la derechita cobarde” para referirse al PP y a C’s. Estos partidos hoy podrían devolvérsela hablando de “la derechita victimista” después de que el de Amurrio insista en que los medios les tratamos mal. ¿Igual se queja de que hablamos poco de ellos? En todo caso, no es una buena idea la que trasladan: el lamento continuo, como en el caso de Podemos (que tardó casi diez días en darse cuenta) no suma, más bien genera rechazo.