A Sánchez le eligen RTVE
A Sánchez le eligen RTVE
Pedro Sánchez ya había elegido: su decisión era presentarse sin hacer mucho como la alternativa ante la pelea que, sin duda, iba a producirse entre las tres derechas. Había decidido dar la espalda a Rosa Mª Mateo y a todos los periodistas del ente público. Había decidido que primero iba él y, después, el servicio público y los votantes. Ahora, la Junta Electoral le ha obligado a tomar otra decisión: Antena3 (por la que había dado calabazas a RTVE) tiene que reformular el debate porque Vox no tiene representación y Sánchez dice que en esas condiciones prefiere el de La1? Y queda mal con todos.
¿Criterios periodísticos en A3Media?
Ana Pastor, como buena progre de postal, también pide que la Junta Electoral no se meta en los asuntos de los periodistas y no regule la campaña, que la deje en manos de los periodistas. ¿Los periodistas o sus empresas, en este caso A3Media? La regulación de la información electoral es una garantía cada día más importante ante la entrada de partidos con muchas influencias (como Ciudadanos y Vox) que, junto a los más grandes (PSOE y PP), pueden arrinconar sin esfuerzo a otras opciones (nacionalistas y partidos sin representación). Ya nos la pueden poner con queso que no nos la dan.
El escenario ideal de VOX
La cancelación del debate a cinco ha beneficiado, sobre todo, a Vox. Abascal se librará así de su segunda presencia televisiva de la campaña (la primera y única de momento fue junto a Bertín Osborne). Si Abascal era capaz de no salirse del guion, seguramente saldría ganando del debate, pero el riesgo estaba ahí. Ahora, permite a Vox victimizarse sin arriesgar que es lo que más les gusta, como cuando programaron actos en la CAV y en vez de servir imágenes de sus alocuciones los indeseables de siempre les regalaron las de los altercados: que otros hablen de ellos. Esa es la campaña de los ultras.