Se suele decir que el tiempo lo borra todo, afirmación que se ha de matizar ya que, como es natural, depende del carácter del suceso, de la relación afectiva con y de los protagonistas, etc.En el caso de Santi, nos resulta difícil borrar del recuerdo a un joven de 17 años llevado al coma cerebral tras ser molido a golpes por una banda de matones, ya que al agredido nadie le defendía sino que era él solo contra varios agresores, que, en principio, nada tenían que ver con la disputa inicial. Un par de días de tensa y desesperanzada esperanza de que Santi reviviese transcurrieron en la residencia donostiarra, en los que la familia, los amigos de esta y del muchacho, velaban impotentes y con dolorida tensión esperando al desenlace que se antojaba fatal.Diecisiete añitos, madrugada lluviosa de las vacaciones de Semana Santa, más en concreto de la Semana de Pascua, en las cercanías de una discoteca, una, en principio banal, discusión acaba con Santi en coma, trasladado al hospital; y nadie sabe nada... solo que su vida se truncó el día 28.No seremos nosotros quienes discutamos las decisiones de la justicia (dura lex, sed lex), ni las de los forenses, mas sí que resulta indudable que la muerte fue acompañada, si no causada, por una paliza, lo que hace difícilmente aceptable que la muerte fuera fruto del azar. Tampoco discutiremos la puesta en libertad de los acusados, presuntos culpables de los golpes que acompañaron a la muerte de Santi, aunque tampoco nos privaremos a la hora de decir que no es el primer caso en que algunos acusados son puestos en libertad, siendo posteriormente condenados ; valga a modo de ejemplo el mediático caso de La Manada. Sin lugar a dudas este proceso judicial es complicado por las numerosas y contradictorias declaraciones de los testigos, y por otros factores que no vienen al caso. Si en los momentos que siguieron entre el día de agresión y el de la muerte, el dolor y la rabia dominaron, hoy es el día, al cumplirse un año, en que el recuerdo hace que se reaviven con fuerza tales sentimientos. Con respecto a aliviar, en cierta medida, tal estado anímico cabe enumerar las muestras de apoyo que recibimos desde el primer momento - la numerosa concentración que se produjo en Donostia en el momento de los hechos es muestra de lo dicho- , la posterior asunción por parte del Ayuntamiento donostiarra del papel de acusación particular... a lo que se han sumar los mensajes de apoyo de diferentes colectivos y de familias que se sienten implicados en la medida en que sus hijos jóvenes pudieran correr situaciones semejantes, etc. Muestras y mensajes de solidaridad y apoyo que en estos días cercanos al aniversario aumentan , ante los que no quisiéramos dejar de expresar nuestro más hondo agradecimiento.Santi, tu alegría y tu carácter afectuoso hasta los bordes de la zalamería, siempre permanecerán en nuestros corazones. ¡Te queremos!