Los silos restantes que quedaban en pie en la parte norte del puerto de Beirut han colapsado por completo este martes tras registrarse varios derrumbes desde el pasado mes de julio por un incendio en las infraestructuras portuarias de la capital libanesa.

Los silos, de casi 50 metros de altura y cincuenta años de antigüedad, han ido cayendo durante el verano como consecuencia de las reiteradas llamas producidas en su interior por la fermentación del grano acumulado.

Estas estructuras, que ejercieron de protección a la parte oeste de la ciudad tras la enorme explosión de 2020 en el puerto, llevaban meses en riesgo de colapso, por lo que las autoridades libanesas anunciaron el miércoles pasado la demolición de los silos de la parte norte, según ha recogido el portal de noticias L' Orient le Jour.

Anteriormente, el Gobierno decidió en abril demoler los silos, si bien la decisión fue suspendida por las protestas de los familiares de las víctimas, que argumentaron que podrían contener pruebas útiles en la investigación en marcha, marcada por la parálisis y los obstáculos políticos y judiciales.

La devastadora explosión del 4 de agosto de 2020 en el puerto de Beirut, con cientos de toneladas de nitrato de amonio almacenado en su interior, dejó más de 200 muertos y enormes daños materiales en la zona y en los alrededores.

El país se encuentra sumido en una crisis desde hace años, situación ahondada por la explosión en Beirut, la pandemia de coronavirus y la situación a nivel político, con unas tensiones que han provocado meses de parálisis política.