- El presidente de Ucrania, Volodímir Zelenski, prometió ayer reconstruir el país cuando finalice la guerra y exigió a Rusia que pague por toda la destrucción que está causando la invasión rusa.

En una nueva alocución, el presidente ucraniano aseguró que el Estado restaurará “cada casa, cada calle, cada ciudad”. “Y le decimos a Rusia: enseña (a la población) las palabras reparaciones y contribuciones”, señaló.

El mandatario hizo estas declaraciones después de que las fuerzas rusas bombardearan la víspera la catedral de la Asunción en Járkov, la segunda mayor ciudad de Ucrania y ubicada en el este del país. “La catedral de la Asunción de Járkov fue dañada como resultado de los bombardeos. Las ventanas y vidrieras están rotas, los muebles de la iglesia y las decoraciones dañadas. La gente que se resguardaba dentro (de los ataques) no resultó herida”, señaló la iglesia en un mensaje de Facebook.

“Es uno de los monumentos ortodoxos más antiguos de la ciudad y de Ucrania”, indicó Zelenski. “Es un lugar sagrado. Ahora ha sido golpeado por la guerra. Ni siquiera tienen miedo a (recurrir a) eso”, dijo sobre las fuerzas rusas.

“Pero Dios ve y responde a todo. No hay búnker para sobrevivir a la respuesta de Dios”, subrayó el presidente ucraniano que añadió, además: “Restauraremos la catedral hasta que no quede ningún rastro de guerra allí. E incluso si destruyen todas nuestras catedrales e iglesias ucranianas, no destruirán nuestra fe sincera, la fe en Ucrania y en Dios”, añadió Zelenski.

El presidente ucraniano afirmó que Rusia “destruye a nuestra gente, quita todo lo que nos es querido, corta la electricidad, el agua, la calefacción a los civiles en Ucrania, deja a la gente sin comida y sin medicinas, y dispara contra las rutas de evacuación”. “No haya armas que no haya utilizado”, añadió.

Consideró cínico que ahora Rusia diga “a sus propagandistas” que van a enviar “columnas humanitarias” a Ucrania, tras prometer establecer corredores para permitir a la población salir de ciudades asediadas o cercadas, como Járkov, Jersón, Mariúpol o Kiev.

En este contexto, la Rada Suprema (Parlamento) de Ucrania, aprobó ayer una ley que prevé la nacionalización de las propiedades rusas en territorio del país en respuesta a la invasión ordenada por el presidente ruso Vladímir Putin el pasado 24 de febrero.

La ley aprueba las bases legales para la nacionalización por motivos de “necesidad social” (incluyendo los casos de necesidad militar urgente) de bienes pertenecientes al Estado ruso y sus resid entes, según la agencia Unian.

Según la norma, la decisión sobre la confiscación de bienes será tomada por el Consejo de Seguridad Nacional y Defensa de Ucrania y aprobada por decreto del presidente ucraniano.

La ley tiene como fin proteger la soberanía e integridad territorial del país, actualmente objeto de la invasión rusa.

Mark Rutte

El primer ministro neerlandés, Mark Rutte, instó ayer a “documentar bien” los crímenes de guerra que se están cometiendo durante la agresión “sin precedentes” de Rusia a Ucrania, y denunció que los ataques “empiezan a centrarse cada vez más” en la población civil y no solo en los objetivos militares. En declaraciones a la prensa, Rutte subrayó que la situación de Ucrania en estos momentos es “terrible, la agresión rusa no tiene precedentes.